La naviera norteamericana propietaria del Oasis of the Seas se encuentra inmersa en pleno proceso de renovación de su flota. En la actualidad consta de 22 unidades clasificadas en seis categorías que agrupan los buques en función de su eslora y oferta de entretenimiento. Pero el número de esta colosal escuadra de lujo aumentará en pocos meses. Al reciente estreno del Quantum of the Seas, le seguirá próximamente la botadura del Anthem of the Seas, ambos de eslora inferior a los de la línea Oasis. Y al gemelo de este, el Allure of the Seas -cinco centímetros más largo que los 362 metros del que amarró el sábado en la Estación Marítima- se sumarán dentro de cuatro años otros dos. El nombre de estos dos nuevos colosos de dimensiones idénticas al Oasis ya han sido encargados al astillero de STX en Saint Nazaire (Francia). Según confirmaron ayer desde Royal Caribbean, la botadura del primero está comprometida para junio de 2016, mientras que el siguiente, se prevé para 2018.
Con estos cuatro gigantes se completará la familia Oasis, unos cruceros que por su diseño y envergadura están considerados en el sector como "revolucionarios". También da una idea del floreciente negocio crucerístico y su repercusión para la construcción naval. El Oasis, botado por los astilleros de STX en Turku (Finlandia), costó, según cifran algunas informaciones, más de 1.000 millones de euros.
