El vivero de empresas de Zona Franca para el auditorio Mar de Vigo y un aparcamiento para turismos en el polígono empresarial de Valladares. Estos son los otros dos compromisos que el Concello arrancó al consorcio, al que se suma el de comprarle el antiguo Rectorado para convertirlo en un centro de vanguardia gastronómica. A cambio, el gobierno local acepta que la incubadora aeroespacial se construya, como defendía la delegada del organismo estatal, Teresa Pedrosa, en el Parque Empresarial de Porto do Molle (Nigrán).
La decisión sobre el emplazamiento de este centro de investigación de la industria del espacio había quedado bloqueada en los anteriores comités ejecutivos del Consorcio. Mientras su delegada mantenía que ya disponía en Nigrán de los terrenos necesarios, el vocal del Concello, el edil de Fomento, David Regades, reiteraba la negativa municipal a admitir que esa instalación se situase fuera de la ciudad, y proponía las plantas vacías del Auditorio_Mar de Vigo. Con el acuerdo pactado, en cuya negociación Regades jugó un papel determinante, la cesión del gobierno local sobre el Vivero de Transferencia de Tecnología Aeroespacial (SBAI) se interpreta como una cuestión menor, y en la que influyeron los riesgos de mantener más tiempo paralizado el asunto, ya que podría perjudicar la ayuda de dos millones de la Agencia Espacial Europea (ESA), supeditada a que la ejecución del proyecto concluya en diciembre de 2015.
Con los otros réditos obtenidos por el Concello en su negociación con el consorcio también consigue darle utilidad a esa superficie aún sin estrenar del Auditorio Pazo de Congresos Mar de Vigo. La redacción del convenio de colaboración entre las dos instituciones que aprobará hoy el Comité Ejecutivo de Zona_Franca recoge un punto que involucra a la Cámara de Comercio. Las tres partes pactan impulsar la apertura este año en varias plantas del complejo de Beiramar de un servicio de coworking -anglicismo que define el espacio donde los emprendedores inician su actividad en un entorno profesional a precios económicos y dotado con las más modernas tecnologías de comunicación-; y un vivero o aceleradora de empresas, donde los nuevos negocios, además de contar con un emplazamiento, reciben asesoramiento hasta consolidar su proyecto, y también a posteriori, para encontrar una ubicación definitiva.
El tercer compromiso del citado acuerdo_Concello-Zona Franca avanza la construcción por parte del consorcio de un aparcamiento al aire libre en el Parque Tecnológico y Logístico (PTL) de Valladares. El gobierno local pondrá a disposición del consorcio una parcela de su propiedad en la calle Portal, de 2.244 m2, para convertirla en un estacionamiento de 90 plazas que daría servicio a los usuarios de la guardería, Vigosónico, el Centro de Día y el edificio de servicios de Zona Franca.
