La agrupación viguesa de Esquerda Unida (EU) ha recabado más de 7.000 firmas pidiendo un referéndum sobre la decisión del gobierno local de ampliar la concesión del servicio de agua a la empresa Aqualia.

En un comunicado, la formación política denuncia, además, que el acuerdo plenario para modificar el sistema de tarificación del agua según el consumo real se tomó "con el conocimiento de los tres grupos de que sin tocar la concesión es imposible hacerlo". "Lo que no paguemos los vigueses en el recibo de Aqualia, ésta lo cobra directamente del Ayuntamiento en forma de indemnización, como así lo hace Vitrasa con el bonobús y en las lanzaderas", advierte EU.

El grupo político afirma que el pliego de la concesión establece una serie de medidas que "dejaron al Ayuntamiento sin capacidad negociadora ante Aqualia, sobre todo al establecer un tope máximo de inversión en obra y al permitir una tarifa abusiva y que no contribuye al ahorro".

Así, considera que la ampliación de la concesión durante cinco años es una "irresponsabilidad" del gobierno local que lo "incapacita" a la hora de conseguir "cualquier solución a este problema".

En esta situación, Esquerda Unida explica que continúa con su campaña de recogida de firmas para pedir un referéndum --previsto en el Reglamento de Participación Ciudadana, según explica-- mediante el que consultar a la ciudadanía sobre la ampliación de la concesión a Aqualia.