El grupo municipal del BNG mostró ayer su apoyo a la construcción de la nueva ciudad deportiva del Celta en Valladares siempre que no suponga coste alguno para la administración local. Esta es la condición que pusieron los ediles Santiago Domínguez y Xabier Alonso para respaldar la ambiciosa actuación además de la inclusión de un espacio deportivo público del que puedan disfrutar los vecinos del entorno.

"Somos socios y pequeños accionistas del Celta, pero por encima de todo somos responsables políticos, por lo que creemos que es bueno que el Concello colabore sin coste público alguno", puntualizó Domínguez, quien señaló que el gobierno local tendrá que expropiar los terrenos y luego el Celta "compensar en unos años mediante el pago de un canon".

Desde el Bloque insistieron en la necesidad de aprovechar la actuación para dinamizar social y económicamente la parroquia y demandaron como "imprescindible un diálogo continuo con los vecinos afectados". Otra de las reclamaciones del grupo es que la ciudad deportiva planteada para dentro de unos cuatro años sirva para potenciar la relación del club con el deporte base. "Si se produce el traslado, A Madroa debería quedar para los clubes pequeños y el campo de Barreiro, para el Gran Peña", señaló Alonso.

El BNG llamó además la atención sobre el mal estado de Balaídos y exigió la búsqueda de alternativas "que impliquen al Concello, la Xunta y la Diputación. Todas las administraciones son necesarias para solucionar el problema y no es bueno que nadie se ponga medallas", advirtieron los nacionalistas.