El Obispado de Tui-Vigo ha hecho público el nombramiento de cuatro párrocos y cinco administradores parroquiales que fueron destinados a distintas áreas de la comarca. Este acto responde a la "dinámica natural" de la diócesis por la que cada año los sacerdotes son rotados entre diversas congregaciones "en función de jubilaciones, traslados y otras necesidades"

Las localidades de Arcos, Celeiros, Cumiar, San Lourenzo de Oliveira, San Mateo de Oliveira y Santiago de Oliveira estarán a cargo de Clodomiro Ogando Durán. Manuel Lage Lorenzo será quien oficie en San Xoan de Fornelos y sus áreas anexas (Lourido, Moreira y Vilacoba). Por su parte Guláns, Arnoso, Cristiñade y Nogueira pasarán a estar bajo la dirección espiritual de Luis Pose Regueiro. El último párroco reubicado por el Obispado es José Antonio García Acuña y le corresponden las parroquias de Ribadetea, San Nicolao de Prado y Paredes.

Entre los cargos reasignados por el Obispado se cuentan cinco administradores parroquiales, que sustituirán temporalmente a los sacerdotes que antes ocupaban las diferentes feligresías. Los administradores deben responder de sus decisiones ante el anterior párroco.

En la localidad de Nespereira será administrador Antonio García Acuña. La parroquia de Vilar de Infesta contará con Fernando Lago Lago. Manuel Pérez Barreiro se encargará de la congregación de Louredo y Amoedo y Cepeda estarán bajo el cuidado de Manuel Rodríguez Rodríguez.

Quizás el caso más destacado sea el de Padróns, en donde los vecinos renunciaron a asistir a misa varios meses tras las desavenencias con el anterior sacerdote por el robo de unas joyas ofrecidas a la Virgen. Pese a que el párroco ha sido quedado al margen del caso al detenerse al presunto culpable, aquél no regresará a la parroquia. Desde este momento oficiará en Padróns Manuel Carballo Hermelo.

Los nombramientos fueron firmados por el obispo, monseñor Luis Quinteiro Fiuza, el pasado día 15, momento en el que ya entraron en vigor.