La concesionaria del casino de A Toxa presentó a la Consellería de Presidencia un proyecto para abrir un nuevo establecimiento en Vigo. Técnicos autonómicos analizan la viabilidad jurídica y económica de una actuación que supone retomar los planes que la empresa abortó hace ya más de un lustro al no conseguir licencia de actividad. La mayor dificultad entonces y ahora es que la ley gallega que regula los juegos y apuestas solo autoriza un casino por provincia o, en todo caso, cuando disten un radio de 25 kilómetros en línea recta o dispongan de un asentamiento de población superior a los 300.000 habitantes.
La legislación del año 1986 se revisó en varias ocasiones y está pendiente de la aprobación de un nuevo decreto para regular los juegos online, pero nunca llegaron a modificarse las restricciones geográficas para la apertura de casinos. Una de los factores que juega ahora a favor del proyecto es que el propio conselleiro de Presidencia, en una entrevista publicada ayer en FARO, reconoce que existe un mercado importante del juego en la zona sur que emigra a Portugal.
Aprovechar esta oportunidad económica es lo que busca ahora la concesionaria Cirsa abriendo un nuevo casino en Vigo o una sala anexa al que gestionan en la isla de A Toxa. El pequeño archipiélago dista de la ciudad olívica 30 kilómetros en línea recta y 59 por carretera, cumpliendo con las limitaciones de la ley autonómica, aunque la clave está en analizar si hay o no mercado suficiente para dos negocios en la provincia.
Desde Presidencia confirmaron ayer que se trata de "un proyecto que viene de largo" y que por ahora se mantiene en fase de estudio. Tan discretamente se han retomado las conversaciones que por ahora el Concello de Vigo desconoce el proyecto. El gobierno local se mostró ayer cauto hasta conocer la actuación con más en detalle, aunque en principio avanzó su apoyo "a toda iniciativa buena y de mejora para la ciudad".
Por ahora se desconoce la ubicación elegida por Cirsa para abrir su establecimiento. Cuando comenzó a gestarse el proyecto, hace casi diez años, la empresa eligió los bajos del Hotel Samil, donde planteaban destinar dos plantas a juegos de azar aprovechando sus facilidades de aparcamiento y su emplazamiento único al borde del mar.
Desde entonces la firma de Manuel Lao no ha dejado de crecer y actualmente gestiona cinco casinos en España, 27 en el extranjero y más de 80 bingos. Cirsa es la primera firma española del sector del juego y buena muestra de su capacidad de reponerse ante la crisis es que cerró 2010 con 260 millones en ganancias, un 25% más que en el año anterior.
