Vigo coordinará una red mundial de nanosatélites impulsada por la Agencia Espacial Europea (ESA) y la ONU con fines de investigación y cooperación humanitaria. La Universidad anunció ayer esta designación, que implicará que los ingenieros del campus diseñen el sistema en el que se integrarán los dieciocho minisatélites fabricados por los países socios. En virtud de este acuerdo, también serán los responsables de los nueve ingenios que lanzará Europa y construirán el que representará a España.

El rector Alberto Gago confirmaba ayer que sigue a la espera de que la Xunta decida integrarse en el consorcio que financiará el proyecto, pero el respaldo del sector privado y del Gobierno central ha sido suficiente garantía para conseguir el proyecto. En total, la Universidad dispondrá de dos millones de euros durante los próximos cuatro años para "pagar a los estudiantes y doctores de la Universidad de Vigo, así como las actividades de coordinación y la construcción del satélite español", según explicaba ayer el responsable del proyecto, Fernando Aguado.

La constelación de picosatélites tendrá una cobertura global y permitirá "comunicaciones de baja velocidad" que se utilizarán para estudiar el cambio climático y en situaciones de emergencia que afecten a países en vías de desarrollo como terremotos o conflictos bélicos.

"La ONU será el principal usuario de la información obtenida, pero los datos también estarán a disposición de los países que forman parte de la red, incluidos nuestros investigadores", destaca Aguado.

La red inicial prevista, con dieciocho nanosatélites de peso inferior a los diez kilos, no permite la transmisión de datos en tiempo real: "Lo hará con cierto retardo, pero si aumenta el número de satélites se podría alcanzar. Son equipos baratos y sencillos de utilizar".

La constelación es una idea impulsada por Naciones Unidas a través de su programa Humsat y Vigo dirigirá, dentro de éste, el proyecto Geocid de la Agencia Espacial Europea.

La labor del equipo vigués está respaldada por la universidad californiana de Calpoly, la Autónoma de México y el Centro Regional de Enseñanza en Ciencia y Tecnología Espacial para América Latina y el Caribe. En la red se integrarán Estados Unidos, Rusia y varios países latinoamericanos, asiáticos y africanos.

Cada país diseñará un satélite compatible con el sistema desarrollado en Vigo con los sensores que considere y cederá los datos obtenidos en cualquier parte del mundo a todos los integrantes de la constelación.

El equipo multidisciplinar que coordina el profesor Aguado está integrado por setenta profesores e investigadores de Telecomunicación, Industriales, Informática o Física, entre otros campos. Este grupo construirá el satélite en colaboración con los expertos de Calpoly, que previsiblemente será lanzado en 2014, y coordinará la red a través de la estación GENSO, otra red mundial de satélites concedida recientemente por la ESA a Vigo, que ya está operativa en el campus.

"Todavía es prematuro para saber qué elementos irán a bordo de nuestro satélite, pero una posibilidad será la de transmitir la información obtenida por sensores localizados en boyas o barcos", explica Aguado sobre la vinculación de esta red al Campus del Mar. "En la medida de lo posible se buscará la cooperación y las sinergias en campos como la telemedicina o los sensores marinos", añade.

La constelación no nace con un carácter comercial, pero tanto Fernando Aguado como el rector vigués confían en que se traduzca en iniciativas empresariales. "Es unprimer paso", dijo ayer Gago.