Mientras Vigo espera por la llegada de Ikea, la multinacional sueca abrirá su segundo establecimiento comercial en las proximidades de Oporto, concretamente en Gaia, a una distancia de 150 kilómetros de la ciudad olívica. Según fuentes oficiales de la empresa, ésta proyecta inaugurar allí un "retail park", que se sumará al centro comercial ya existente desde 2007 en Matosinhos, municipio cercano a Oporto.

Desde Ikea-España señalan que su intención es inaugurar una tienda en el sur de la comunidad gallega. "Vigo es una posibilidad, pero no está nada cerrado", aseguran. En estos momentos, la firma "está volcada" con la apertura de su primer establecimiento en Galicia, que se emplazará en A Coruña.

En Portugal la multinacional se ha marcado el objetivo de crear 10.000 puestos de trabajo, una cifra que duplica las previsiones iniciales, al igual que la inversión en el país luso. El grupo destinará 1,1 millones de euros a su actividad al otro lado del Miño hasta 2015.

La empresa sueca quiere reforzar su presencia en Portugal y para ello, aparte de incrementar empleos e inversión, pretende alcanzar siete establecimientos en funcionamiento. Actualmente dos están operando y en junio abrirá sus puertas una tienda en Loures, al norte de Lisboa. En Gaia ubicará su primer parque comercial –"retail park"– en el país vecino, y estará formado por grandes cadenas, según señalan desde la multinacional. Aunque todavía no dispone de terrenos, desde Ikea destacan que el proyecto "está muy bien encaminado" para hacerse realidad en el horizonte de 2013. También abrirá un centro comercial en la zona del Algarve mientras que los tres establecimientos restantes todavía no tienen emplazamiento fijo.

En Paços de Ferreira mantiene funcionando dos fábricas, a la se sumará una tercera a finales de este año. Estas instalaciones exportan el 90% de su producción a otras tiendas de Ikea de países como España, Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia o Portugal, fundamentalmente.

Proveedores

Desde la firma sueca avanzan que este año estiman comprar 100 millones de euros en material a proveedores portugueses y en 2011 esperan doblar esta cantidad y llegar a los 200 millones. "Es importante para nosotros tener productos confeccionados en los países donde se abren los establecimientos, no sólo para rebajar los costes de la empresa, sino también el de los clientes", declara uno de los responsables de la multinacional.