El pasado 10 de mayo entraba en vigor el decreto de la Xunta que regula las viviendas turísticas y lo hacía ya bajo la amenaza de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, que amenazó con impugnar la norma ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia al entender que contiene "restricciones innecesarias".

En septiembre, el organismo llevó a cabo su advertencia, cuando el registro incluía ya 4.500 pisos registrados, pero dos meses después el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia avalaba a la Xunta al pronunciarse contra el recurso de la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga) al entender que "no vulnera el derecho a la libertad de empresa ni a la libre competencia".