La dirección y los sindicatos de Paradores Nacionales alcanzaron en la madrugada de ayer un acuerdo in extremis que permitirá a Galicia mantener sus once establecimientos a cambio de una mayor flexibilidad laboral, según apuntaron fuentes de la empresa pública y las centrales sindicales. El acuerdo reduce también casi a la mitad el número de despidos que se llevarán a cabo en toda la red de nacional, desde los 644 trabajadores a 350. En la comunidad gallega, donde no se ha concretado el número de despidos (que será inferior a los 85 anunciados en noviembre), se descarta finalmente el cierre de los hoteles de Verín y Ferrol, y se moderan los paros temporales anunciados en Monforte, Santo Estevo, Tui y Villalba.

Este acuerdo fue posible tras una larga negociación con la dirección de Paradores, que había propuesto el cierre de siete establecimientos (dos en Galicia), paros temporales de hasta cinco meses al año en otros 27 centros y 644 despidos para devolver a la compañía pública a la rentabilidad, lo que provocó el rechazo frontal de los trabajadores. Finalmente, Paradores solo cerrará el hotel de Puerto Lumbreras, en Murcia; moderará la duración y el impacto laboral de los cierres temporales, y reducirá el número de despidos a 350 a cambio de una mayor flexibilidad laboral de la plantilla, que tendrá que asumir una rebaja proporcional de los salarios de hasta un 3%.

Respecto a los cierres temporales, se acordó que los trabajadores se acogerán durante esos periodos a un expediente de regulación de empleo temporal (Paradores había planteado convertirlos en fijos discontinuos) y se aprovecharán los días de descanso. De esta manera, Monforte cerrará solo por vacaciones del personal; Santo Estevo y Tui, durante tres meses al año; y Verín y Villalba, durante cuatro meses. En los cinco centros, los cierres temporales se realizarán solo durante un periodo de tres años. Durante ese trienio también se clausurarán los restaurantes de Ferrol, Monforte y Tui, que ofrecerán solo servicios de cafetería.

Otra medida adicional que se pactó a nivel nacional fue la suspensión de contratos y la reducción de jornadas a través de un ERE temporal que afectará a 400 trabajadores, a los que se les aplicará una rebaja de su jornada laboral del 25%. El acuerdo con Paradores también se notará en el bolsillo, ya que se fija una reducción salarial proporcional que va desde el 0,5% para quienes perciban hasta 14.000 euros brutos anuales, al 3% a partir de los 40.001, así como la supresión del complemento por objetivos.