Clases prácticas para aprender a volar

Seis personas usuarias del centro de atención diurna, terapéutica y ocupacional que tiene Cogami en Medelo están viviendo una experiencia piloto que lleva por nombre HAVI (Hacia una vida independiente). Esta iniciativa consiste en compartir un piso durante tres meses con el apoyo de dos profesionales tituladas en educación social y tres cuidadoras.

Los primeros en iniciarse en esta nueva experiencia son Óscar, Gaspar y Javier. Los tres comparten una vivienda dotada de tres habitaciones situada en el Concello de A Estrada. Fueron seleccionados por el equipo profesional del centro de Medelo debido a que cumplen con dos requisitos fundamentales: desean vivir de manera independiente y las familias con las que conviven están de acuerdo con el proyecto. En las próximas semanas, serán otras tres personas las que puedan vivir esta experiencia hasta que finalice, el 15 de junio.

Promover el incremento de la participación, favorecer el desarrollo emocional y comunicativo, aumentar la autoestima, fomentar la autonomía y fomentar entre las familias y personas cuidadoras que sus hijos o familiares vivan y tomen decisiones independientes y autónomas son otros de los objetivos que pretende cubrir este programa hacia una vida independiente.

Este proyecto, financiado por Fundación “la Caixa”, tiene como objetivo facilitar una primera experiencia de vida autónoma a las personas usuarias del centro de Medelo. Todas ellas estarían preparadas para tener una vida más independiente pero no cuentan con la oportunidad para poder llevarla a cabo. Durante los nueve meses que tiene este proyecto como duración total se buscará el desarrollo autónomo de la persona, favoreciendo su participación social y laboral, para los que se trabajará la vida independiente, la economía en el hogar y el cuidado personal.

Desde Cogami explican que proyectos asi son necesarios porque en el entorno en el que viven las personas usuarias del centro de Medelo carecen de recursos similares y las personas que las cuidan van envejeciendo. “Si no se empieza a trabajar en este tipo de experiencias, en el futuro muchos vivirán institucionalizados, lejos de su entorno y en perjuicio de sus derechos individuales. HAVI pretende facilitar a las personas con discapacidad intelectual que cuenten en su entorno con posibilidades reales de ejercer su derecho a una vida autónoma en su comunidad de referencia”.