La AP-53 es actualmente casi la única vía de comunicación entre Deza y Santiago, una vez que la pregonada y esperada adecuación de la N-525 como alternativa libre de peaje tampoco se concretó. Vecinos y usuarios profesionales se ven casi obligados a utilizar la carretera de pago pese a sus prohibitivas tarifas y ni siquiera la carestía de esta autopista hace que en los últimos tiempos esté marcando picos máximos históricos de desplazamientos. Ocurrió el año pasado, cuando sus 6.302 viajes de media diarios colocaron a la AP-53 en su récord desde que se inauguró. La vía se puso en marcha en 2003, aunque inicialmente solo unía Compostela y Silleda y un año después ya se abrió el tramo completo hasta Dozón.
Recientemente el Ministerio de Fomento divulgó el tráfico de enero de este año, que supone otro récord mensual histórico, con 5.530 desplazamientos diarios. Nunca se había arrancado un año con este volumen de tráfico, pues en enero de 2016 habían sido 5.357 viajes y doce meses antes, 5002. Si comparamos el pasado enero con el mismo mes de 2004, el tráfico actual se incrementó en 1.817 vehículos al día.
