Nuevo tropiezo del Poio Pescamar, que suma su quinta derrota consecutiva y continúa sin puntuar lejos de casa. El equipo rojillo cayó en Murcia por la mínima ante el Jimbee Roldán y se quedó sin ver puerta por tercera vez esta temporada en un encuentro poco efectivo en ataque que se resolvió con un solitario gol de la jugadora loca, Sojo en la segunda parte.
La primera parte se sucedió con mucho respeto por parte de ambos conjuntos y poco atrevimiento en ataque de las de Poio que no lograban encontrar huecos para hacer daño a la meta local. El encuentro se fue al descanso sin goles tras una rácano primer compás en el que las escasas ocasiones del choque cayeron del lado murciano.
Con las conserveras esperando su oportunidad a la contra, el Jimbee llevó el peso del partido en la segunda parte igual que hizo en la primera, pero con una mayor presencia en las inmediaciones de la portería rojilla, fruto de ello tuvieron hasta dos ocasiones claras en los primeros minutos del encuentro para poder romper el empate inicial. Las tablas se deshicieron a los diez minutos de la segunda parte, gracias a un tanto de Sojo que no perdonó en su segunda ocasión clara y aprovechó un buen pase de su compañera Miriam, quien protagonizó una bella jugada por la banda. Pese a todo el Poio Pescamar tuvo opciones de llevarse al menos el empate cuando pasaron a jugar cpon portera-jugadora en los últimos cinco minutos en los que primero la portera local Espe, y después la jugadora murciana Ese, salvaron a su equipo.
Las de Jorge Basanta tratarán de revertir la situación este fin de semana cuando reciban en A Seca al Móstoles.
