El entrenador del Vilariño considera que su equipo dio la cara ante un poderoso adversario. "Más que la fuerza se impuso la calidad del rival, que es innegable -apuntó-. Nos marcan justo en el momento en que hicimos cambios, tuvimos un pequeño desajuste ahí y en esa jugada vino el gol. Si por fuerza fuese, no embotellaríamos a la UD Ourense diez o quince minutos al final, después del gol. Tuvieron un par de ellas antes de marcar, pero creo que hemos sido unos dignos rivales".
Quino Iglesias lamentó no haber tenido más ataques claros: "Tampoco tuvimos ocasiones claras. Una de Faílde que medio se trastabilló y al final remató mal, pero siendo objetivos, sabíamos que íbamos a hacer muy pocas ocasiones a la UD Ourense. Nuestra opción era que en alguna de las que tuviésemos, ser capaces de meter. No fuimos capaces ni siquiera de generar ocasiones claras. Hubo una en la primera parte y otra en la segunda, un tiro de Jorge entrando desde atrás con tiro desde la frontal, y ahí se acabaron nuestras ocasiones. Empuje, actitud, que es lo que se le exige, y en momentos, cuando éramos capaces de bajar el balón, tratar de manejarlo, pero es complicado contra la UD Ourense. La verdad es que me voy muy contento del partido". El técnico pide a los suyos que mantengan el listón: "Estoy un poco preocupado porque ya me han demostrado hasta dónde pueden llegar y mi trabajo es conseguir que estén así en cada partido y den este nivel. Si lo hacemos, creo que se va a hablar del Vilariño".
