Los más de 200 jugadores que componen el Frigoríficos del Morrazo y el Luceros, así como técnicos y directivos participaron ayer en uno de los actos tradicionales de principios de año, la chocolatada, que en esta ocasión se retrasó unos días por el cambio de entrenador en el conjunto de Asobal. Los 19 equipos que integran la estructura de la entidad canguesa formaron en la fotografía de familia, uno de los actos centrales del día.

La jornada incluyó asimismo la celebración de partidillos de 15 minutos entre los diferentes equipos hasta la categoría cadete. En los encuentros tomaron parte jugadores del primer equipo para fomentar la convivencia entre el presente y el futuro del club.