Con 25 años, el palista cangués que ganó el bronce con el K4 español en el Campeonato Europeo disputado el año pasado en la República Checa, acudía en Brasil a su primera cita olímpica.

- Sus primeros Juegos Olímpicos. ¿Las sensaciones fueron las que se esperaba?

- La verdad es que no me lo imaginaba así. Lo que pasa es que nosotros tuvimos que estar en un hotel fuera de la villa, porque la lagoa estaba lejos de la villa. Al final en el hotel solo estás con deportistas de piragüismo y es lo más parecido a un Campeonato del Mundo normal. Tuvimos muy poca convivencia con deportistas de otras disciplinas.

- ¿Qué fue lo que más le sorprendió?

- Todos los competidores mueren en la piragua porque todos los deportistas luchan durante cuatro años para ser campeones olímpicos. Se nota eso. Pero lo que más me sorprendió es que llegué a Brasil pensando en juntarme con estrellas de otros deportes, y en ese sentido es una competición más.

- O sea, que no se encontró a Usain Bolt paseando, ¿no?

- (Risas). No. Me encontré a la jamaicana que ganó los 100 metros lisos femeninos, Elaine Thompson. Phelps es intocable, casi ni se le ve. Pero sí que me encontré con todo el equipo de baloncesto masculino, con Gasol a la cabeza.

- ¿Tiene una fecha prevista para regresar a los entrenamientos o algún objetivo a corto plazo?

- No tengo previsto entrenar pronto. Estaré parado un largo tiempo. En este punto dependerá de lo que se me ofrezca. Del futuro que yo pueda ver o de lo que me pueda motivar el proyecto que forme al Federación.

- Mañana lo reciben en el Concello. ¿Lo siente como un orgullo?

- Muchísimo. El hecho de que colgasen pancartas en el balcón, parece una tontería, pero me gustó mucho. Porque recuerdo cuando se colgaban las de David Cal, Teresa Portela y Carlos Pérez. Es de lo que más ilusión me ha hecho. Que la gente me apoyase y estar orgulloso de representar a Cangas.