El Campeonato de España aguarda por el Luceros. Tras varios años de sequía y cierta irregularidad en los resultados, el club cangués ha conseguido meter a dos de sus equipos en el Zonal. El título de Liga de los infantiles y la segunda posición de los cangueses les da el pasaporte para medirse con los mejores conjuntos nacionales y de paso recuperar el prestigio de una cantera que se ha fortalecido de forma considerable en las últimas temporadas.

El infantil de Adrián Pumar selló el fin de semana su título en la División de Honor Gallega. Lo hizo por un solo gol de diferencia, ya que acabó igualado a puntos con el Octavio e hizo valer el hecho de haber ganado de cuatro en casa y haber perdido de tres fuera en los duelos particulares. "Al final fue más apretado de lo previsto. Fuimos primeros siempre porque ganamos todos los partidos en la primera vuelta, pero en la segunda pinchamos en alguno", dice. Los cangueses solo cayeron con Octavio y Xiria y empató ante el Tui. Pumar, que cuenta con Pablo Castro como ayudante, destaca la entrega de sus hombres. "Somos 14 y raro es el día que faltan dos", señala.

El equipo está integrado por los porteros Aarón Bon y Éric; los laterales derechos David e Iván; los laterales izquierdos Alexander y Javi Figueroa; los centrales Alexandru y Diego Paz; los pivotes Xián, Carlos Veloso y el alevín Pablo; los extremos derechos Diego Rouco y Andrés; y los extremos izquierdos Diego Martínez, Marcos y los alevines Adrián Bernárdez, Adrián Gómez y Brais. Pumar destaca el potencial físico de una escuadra basada en la defensa. "Es la idea general del club y algo debe influir para que tanto los cadetes como nosotros seamos los equipos menos goleados de nuestras ligas", dice. Las defensas que pone en práctica son abiertas, 3.3 o 3.2.1, "para que aprendan a defender individualmente. Ya habrá tiempo de que hagan 6.0", sentencia.

El cadete de Marcos Otero, "Quiños", que tiene como ayudante a Fernando Eijo, es otro equipo que ha encontrado el equilibrio entre sus buenos números defensivos y su vocación ofensiva. En su competición solo fue superado por el Bueu Atlético. "Ellos tienen un jugador de nivel estratosférico (el lateral David) y nosotros un equipo más compensado", señala. El inicio no fue sencillo, "ya que en cadetes se da el gran paso para jugar de un modo más táctico y no tan individual. Nos costó porque cada uno hacía la guerra por su lado, pero a final de temporada éramos el mejor equipo", dice.

El juego se vio acompañado por los resultados, ya que los cangueses solo cedieron un empate en toda la segunda vuelta. El equipo está formado por los metas Abel y Pombal; los laterales derechos Bruno y Palomita; los laterales izquierdos Ángel y Pousa; los centrales Eloy y Javi; los pivotes Óscar y Mauro; los extremos derechos Berto y Pedro; y los extremos izquierdos Éric y Marcos.