El Rápido necesita marcar en Peralada. Es la primera vez en el play off de ascenso que se ve en esa urgencia. El ascenso le exige al menos un gol. Pero a la vez tan solo un gol. Tomás, uno de los jugadores que tendrá la misión de conseguirlo, anticipa que el equipo boucense no descompondrá la figura. Son los catalanes los que sufren mayor presión, pese a lo que dicta el marcador de la ida.
El Rápido gestionó las dos anteriores rondas desde su solvencia defensiva, que le permitió lograr cómodas ventajas en la ida (0-2 en Cayón, 0-1 en Santa Brígida) para sentenciar después en la vuelta (4-0 y 1-0). El Peralada rompió siete partidos de imbatibilidad, sumándole los últimos de la liga regular. El gol en propia meta de Vieytes dejaba en 678 los minutos sin encajar de Diego García. Un mazazo para los de Patxi Salinas, que daban prioridad a dejar la portería propia a cero, pero del que supieron reponerse. Pese a jugar la última media hora en inferioridad por expulsión de Adrián, Carlos lograba el empate de penalti en el 88.
"Viendo la primera parte, parecía que iba a ser difícil remontar. Pero con nuestra actitud en la segunda, incluso quedándonos con un hombre menos, tenemos muchas ganas de afrontar el partido del próximo domingo. Es un resultado que puede ser bastante bueno. Nos vale cualquier victoria y cualquier empate con goles. No está mal", analiza Tomás Comesaña.
El partido de ida, a la vez que retrata la calidad del Peralada, también lo humaniza. "Sabíamos que nos íbamos a encontrar un equipo difícil por lo que nos había contado Patxi durante la semana. Tienen jugadores semiprofesionales o que por lo menos están cobrando como profesionales", comenta el ariete. Y contrapesa: "Somos once contra once. Dentro del campo suele llevarse la recompensa el que más se esfuerza. Intentaremos que el orden, que es lo que buscamos nosotros, combata contra su calidad. Vamos con respeto y humildad, pero con la intención de festejarlo después".
Los aurinegros no se sienten presionados por ese 1-1. "Realmente solo nos hace falta un gol y un gol se marca en cualquier momento. Si vamos 0-0 en el minuto 80, probablemente los que estén un poco más nerviosos sean ellos", augura Tomás, que quiere jugar con la presión que para el Peralada supone ser favorito y la duda codiciosa de si afianzar lo que ya posee. Tomás cree que, por el contrario, "tendrán que salir a asegurar porque un tanto nuestro los elimina".
Salinas maneja un plan muy concreto en su delantera: los fornidos Carnero y Tomás desgastan a la defensa rival; después Carlitos o Pardavila exhiben su velocidad. "Cada uno tiene que aprovechar las virtudes que tiene y en función del rival jugarle de una forma u otra. Durante la liga nos dio un buen resultado y la estamos respetando durante la fase de ascenso", refrenda Tomás. "Se trata de creer en lo que haces".
