- De vacaciones en casa, por fin...

- He estado bastante tiempo fuera de Galicia. Llegué el 21. He estado estudiando y de vacaciones, probando nuevos deportes y pensando, pero sin ningún tipo de prisa.

- ¿Y en qué otros nuevos deportes se ha aventurado?

- Nada. He estado navegando un poco con kaysurf, que tenía ganas de probarlo, y en estas vacaciones estuve navegando todos los días, que era lo que necesitaba.

- Era urgente una desconexión así después de Río.

- La verdad es que sí. Después de unos años tan duros necesitas desconectar un poco y hacer un poco de limpieza y para eso necesitas desconectar del todo. Creo que como en todos los deportes. Es como cuando la gente no tiene vacaciones después de un año duro de trabajo. En el deporte necesitas liberarte un poco y hacer cosas nuevas, para divertirte y desconectar, sin más fin que ese.

- Había fijado estas fechas para decidir sobre su futuro, ¿ha tomado ya una decisión?

- Sí que ya estoy sopesando varias posibilidades de futuro, pero no está nada cerrado ni yo misma sé aún hacia dónde dirigirme. No voy a hablar de nada hasta que no esté todo cerrado porque sería como dar palos de ciego. Lo bueno es que tengo muchas salidas en el mundo de la vela, algunas pueden ser olímpicas y otras no, pero no tengo nada cerrado ni confirmado, así que de momento voy a seguir pensándolo con tranquilidad y llevándolo discretamente. Cuando tenga tomada una decisión se lo diré a la gente para que puedan seguirme. De momento quiero disfrutar de la Navidad contenta y tranquila. No tengo ninguna prisa por decidirlo, así que hasta que se cierre estaré como ahora, valorando todas las opciones. A ver si en poco tiempo ya puedo decantarme por alguna.

- ¿La Volvo Ocean Race es una de esas opciones que le seducen?

- Pues sí que me seduce, como otras. Es verdad que con el cambio de reglamentación se presenta una buena oportunidad. Como todas las regatistas, vemos que con ese cambio de norma se nos abre una puertecilla y sí que pensamos en ello, pero dentro de otras muchas opciones que también valoro. Es verdad que está en mi cabeza, no voy a decir que no, pero no estoy solo focalizada en que esa es la opción que tengo que coger.

- ¿No descarta entonces competir por los Juegos de Tokio?

- No, para nada. Después de unos Juegos de tantas emociones en lo que menos piensas es en otra campaña olímpica, que son muy duras, y sobre todo, si el resultado no es el deseado, se hace incluso más duro pensar en una nueva. Lo único que tengo claro ahora es que me gusta la vida que me dan las campañas olímpicas, que de momento el trabajo que hacemos nos ha llevado al éxito de un modo u otro, así que por qué no pensar en Tokio. Puede que haya esa posibilidad, no está descartada. Es una de las opciones que también valoro. Es la vida que elegimos y nos gusta mucho, pese a que somos conscientes también de que es una vida muy dura. Hay que parar y pensarlo muy bien antes de empezar porque una vez que te metes y empiezas ya no hay vuelta atrás. Me encantaría que pudiese haber más proyectos de Berta Betanzos y Támara Echegoyen juntas, pero de momento las dos estamos disfrutando de esas cosillas que durante la campaña no podemos hacer y ahora es tiempo de pensar en las opciones y de seguir disfrutando del agua de otra manera. Estoy contenta porque tengo muchos proyectos en la cabeza y creo que algunos pueden salir adelante, pero de momento aún es muy pronto, no sé si para decidirse, pero sí quizá para meterse ya en ellos.

- De todos modos, la Volvo y los Juegos no serían experiencias excluyentes, ¿no?

- Pues la verdad es que yo creo que no. Una vez tomada la decisión habría que estudiarlo y valorarlo. No es cuestión de hacer las cosas a medias. Tienes que ver si optas por las dos cosas y poder ir a tope con ambas. Como aún no lo tengo decidido no lo he estudiado con detenimiento. Creo que sí pero hay que sentarse y ver si es posible y luego decidir. De todas formas aún queda tiempo para llegar a ese punto; por lo tanto, de momento vamos a tener todas las opciones en la cabeza y ya veremos qué hacemos.

- Ahora toca disfrutar de la Navidad, de la familia y de Galicia.

- Sí, estoy disfrutando de una manera más relajada de la vela y de mis hobbys náuticos y también de la familia y las amigas, que estas fechas son siempre las mejores para reunirlas. Ahora llevo la vida un poco más relajada, disfrutando un poquito, que ya tocaba.

- Se acerca el final del año, ¿ha hecho ya balance de 2016?

- Los periodistas me obligáis un poco a ello. Este año se me ha pasado volando. Se ha pasado casi sin darme cuenta. Parece que fue ayer cuando empecé con Berta Betanzos navegando en el 49er FX? No puedo quejarme del año. No creo que haya muchos deportistas que puedan decir que han tenido la temporada que hemos tenido Berta y yo, sobre todo consiguiéndolo como lo hemos conseguido, a base de trabajo y teniendo un gran equipo alrededor. Hemos ganado el Mundial en febrero, el bronce en el Europeo, en los Juegos de Río encabezamos la regata durante dos días, con opciones de lograr el oro el último día. Creo que no podemos olvidar que eso no es fácil, que no está al alcance de muchos deportistas y es hora de valorar el diploma olímpico conseguido. Lo que más vale es que de lo realizado en los Juegos no te puedes reprochar absolutamente nada y deberíamos estar orgullosos. Al final una medalla y un diploma los separa una regata de 20 minutos y hay que ser constructivos y darse cuenta de que un regatista no se forja en esa regata sino a lo largo de toda la campaña. Berta y yo no logramos el oro en Río, pero creo que este equipo se merece ser de oro así que podemos estar muy contentos por ello.

- ¿Ningún reproche, en consecuencia, nada que habría cambiado?

- No puedes volver de los Juegos sin saber que lo has dado todo. Berta y yo tuvimos un tiempo limitado, de solo tres años y medio, y conseguimos aprovecharlo de la mejor manera posible. Las horas en el agua fueron muchas y se supieron gestionar muy bien y formamos un gran equipo que logró que Berta y yo al final compitiéramos de la forma en la que hemos competido. Es para estar muy orgullosos.

- Ese cuarto puesto influye en la beca ADO para el próximo ciclo olímpico ¿Condiciona de algún modo en su decisión sobre el futuro?

- No tengo ni idea. Sí que condiciona porque no es lo mismo tener una medalla que un diploma, pero siendo sincera no tengo ni idea porque cada cuatro años cambia la legislación al respecto, cada ciclo cambia. Evidentemente no es lo mismo haber ganado un diploma que una medalla de oro y es verdad que se notará en la beca, pero de momento no es algo en lo que he pensado. Independientemente del dinero que recibamos por los Juegos somos un equipo con mucha proyección y no me cabe ninguna duda de que recibiremos apoyo. Será con más o con menos, pero no he pensado mucho en ello. En este momento no es esa mi preocupación.

- ¿Con quién se guía en esta fase de dudas y decisiones?

- Siempre tengo mis padrinillos, mi gente de apoyo a la que siempre pregunto. En mi vida náutica y personal siempre hay personas que están a mi lado y una de ellas es Pablo Iglesias, pero tengo más personas alrededor a las que preguntar cuando tengo dudas, algo normal cuando piensas en nuevos proyectos.

- En esta fase de reflexión, ¿a qué dedicará su tiempo?

- Siempre que estoy en Galicia y tengo posibilidades navego en todas las regatas que puedo. En el circuito de J70 ya he participado siempre que he podido. Es una gran oportunidad para seguir navegando ya que es un circuito que tiene muy buen nivel y si tengo la oportunidad claro que me uno a ellos, pero ahora mismo estoy más enfocada a navegar en foils (pequeñas alas aplicadas a monocascos que multiplican el empuje), que son el futuro de la vela, y seguramente me concentre más en el Centro Galego de Vela, que es donde tengo el barco. Trataré de progresar un poco en este tipo de navegación, sobre todo para entenderla, porque considero que es el futuro de la vela.