El entrenador del Porriño, Abel Estévez, hacía a la conclusión del partido una lectura positiva pese al dolor que generaba la derrota de su equipo por un margen tan pequeño y después de un partido igualado y resuelto por simples detalles: "Es duro perder de esta forma, considero que el equipo ha disfrutado de las mismas oportunidades en la primera y en la segunda mitad, pero la diferencia ha estado en la portería. Mercedes ha resultado clave. El mensaje que el equipo lanza a la gente es que la derrota de hoy no represente el final de nada, nos gustaría que en los próximos partidos en casa contra Bera Bera y Rocasa Gran Canaria ACE el apoyo sea similar, la Copa debe servir para ello".

Por su parte, Cecilia Cacheda aseguró que "jugar en casa, delante de 2.000 personas, es algo espectacular, en siete años que llevo aquí en Porriño nunca disfrutamos de algo así, ojalá que el apoyo que hemos recibido en la Copa tenga su reflejo en el futuro, cada sábado jugamos con el deseo de ver la grada repleta de gente".