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El Celta se hizo mayor ante el Espanyol

Los celestes reciben el sábado (18.15 h.) al rival frente al que en junio de 2013 obtuvo "in extremis" la permanencia en Primera - A partir de esa gesta, el conjunto vigués ha ido creciendo en lo deportivo y en lo institucional

El Celta se hizo mayor ante el Espanyol

La visita del Espanyol a Balaídos (sábado, 18.15 horas) es una fecha especial para el celtismo desde hace dos años y medio. El 1 de junio de 2013 conseguía el equipo vigués una gesta casi irrepetible: ganar in extremis al conjunto blanquiazul, después de favorecerle los resultados de los otros equipos implicados en el descenso. De esa forma, selló su continuidad una temporada más en Primera División.

Ese punto de inflexión lo aprovechó el club vigués para construir un proyecto estable, que mejora año a año en lo deportivo y en lo institucional. Ahora mismo, el Celta es el cuarto clasificado de la Liga, además de poder presumir de una economía doméstica saneada tras superar un proceso concursal. Aquel sufrido triunfo ante los periquitos -con gol de Natxo Insa- cambió la historia del Celta. Fue una de las mayores explosiones de alegría del celtismo en los últimos tiempos. Por ello, y como diría el barcelonista Gerard Piqué: "Gracias Espanyol, contigo empezó todo".

Con ese punto de gratitud habla Gustavo Cabral al recordar aquel partido. El central argentino fue uno de los ocho futbolistas de la actual plantilla celeste que vivió aquella inolvidable jornada en Vigo. "Me trae muchos recuerdos. Hay lindos recuerdos y sensaciones de ese partido porque pudimos seguir en Primera y por todo lo que ocurrió después: la gente se metió en el campo de juego y pudimos disfrutar todos de quedarnos en Primera", rememora Cabral.

A Iago Aspas también le asaltan "recuerdos muy bonitos" de aquella jornada, "aunque fueron momentos tensos los vividos, pero al final salió todo como esperábamos. No viví nada parecido en mi vida. Estábamos todos atenazados, esperando por los resultados de otros campos, sobre todo de Riazor", apunta el futbolista de Moaña. El Deportivo perdió en casa ante la Real Sociedad y descendió a Segunda División.

"Fue una de las cosas más lindas que me ha pasado en el fútbol", reconoce Augusto Fernández, capitán del Celta. "Me ha tocado un par de veces salir campeón y esa fue la única vez que me tocó pelear abajo [en la clasificación] y sentí una emoción difícil de explicar. Es una emoción distinta a cuando sales campeón. Esa es una sensación de alivio y la de campeón es más de euforia. Fue un alivio muy grande sacarnos de encima algo tan pesado porque para mí hubiese sido falta descender", admite Augusto.

Vlado Gudelj, delegado del equipo vigués, vivió la gesta desde el césped. "Recuerdo muchas veces ese partido porque fue un agobio impresionante. Era un partido clave para el futuro del club", señala el exfutbolista balcánico, que horas antes de Celta-Espanyol protagonizó una anécdota con su homólogo del conjunto españolista que el árbitro Mateu Lahoz reflejó en el acta: "A las 11.58 horas, en la zona de aparcamiento del Estadio de Balaídos, previo a la reunión protocolaria prepartido, el delegado del R.C.D. Espanyol, José María Calzón Calzón, se dirigió a los miembros del equipo arbitral en un tono jocoso en los siguientes términos: "Estábamos arreglándolo todo, no hace falta ni que arbitréis", en presencia de todos los participantes de dicha reunión. Estos hechos fueron captados por una cámara de televisión", escribió entonces Lahoz. Gudelj, sin embargo, no olvida "el último córner del Espanyol. Lo pasamos muy mal, de verdad".

"Nos acordamos siempre de ese partido, en el que el Espanyol no nos regaló nada, al contrario: quisieron ganarlo hasta el final pero hicimos todo lo posible para que los tres puntos se quedaran aquí", comenta Hugo Mallo, otro protagonista de aquella histórica jornada.

Su compañero Levy Madinda la vivió entre el banquillo y el campo: "Para nosotros era un partido muy difícil y complicado, teníamos que ganar y esperar por otros resultados para seguir en Primera. Es de esos momentos que no puedes olvidar".

"Desde entonces, el Celta ha mejorado en todos los sentidos: a nivel futbolístico e institucional. Ojalá no se vuelva a repetir y que el Celta continúe muchos años en Primera. Ahí empezó todo: continuar en Primera y comenzar a progresar. Ahora estamos hablando de un Celta distinto", concluye Cabral.

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