El Mundial de MotoGP avanza hacia un final de infarto. Rossi y Lorenzo, los dos pilotos de Yamaha, prometen emoción hasta el último día. Ayer se produjo un nuevo aviso. Tras una jornada de extrema igualdad en los entrenamientos, ambos consiguieron los mejores tiempos separados por menos de una décima. Nada. Una idea de la extrema igualdad que se espera en la carrera de hoy (7:00 horas) y en la que Lorenzo tratará de recortar alguno de los 14 puntos de margen que en estos momentos tiene el italiano.

Lorenzo consiguió el mejor tiempo y nuevo récord del circuito en su última vuelta y a pesar de fallar en el primer parcial, cuando Rossi ocupaba la primera plaza.

Con la ausencia del sanmarinense Alex de Angelis (ART), que sufrió una grave caída durante la cuarta y última tanda de entrenamientos libres por la que tuvo que ser evacuado en helicóptero hasta el Dokkyo Hospital de Mibu, según informó la organización del campeonato, los pilotos salieron a pista para disputar la primera clasificación, que otorgaba el pase de los dos primeros a la segunda y última.

Inicialmente fueron el español Maverick Viñales (Suzuki GSX-RR) y el japonés Katsuyuki Nakasuga, piloto probador de Yamaha, los que se situaron en esas posiciones, con el español sólidamente asentado en la primera plaza, mientras que el nipón perdió la segunda en manos del británico Scott Redding (Honda RC 213 V) en un apretado final en el que también tuvieron opciones el alemán Stefan Bradl (Aprilia) y el colombiano Yonny Hernández (Ducati).

Mientras Rossi se ponía líder, Jorge Lorenzo, quinto en esos instantes, regresó a su taller para cambiar de neumático trasero, el británico Bradley Smith (Yamaha) se iba por los suelos en la curva once y después una segunda vez en la entrada a meta, y Marc Márquez (Repsol Honda), era tercero.

Lorenzo volvió a la pista en la sexta plaza, superado también por el segundo piloto de la escuadra Repsol Honda, Dani Pedrosa, y tras una primera vuelta de lanzamiento, al final cumplió con lo que todos esperaban al romper la barrera de los 44 segundos para establecer un nuevo récord de la pista en 1:43.990, 232 milésimas más rápido que Rossi y 512 por debajo del récord de la vuelta rápida de entrenamientos del año pasado.

Aún entró una segunda vez en su taller Lorenzo para protagonizar un nuevo intento, mientras tanto Márquez como Rossi marcaban sendos parciales de vuelta rápida que colocaron al italiano primero (1:43.790) y al español de Repsol Honda tercero (1:44.216).

A pesar de un pequeño error en el primer parcial que le hizo rodar por encima del récord, Jorge Lorenzo completó los tres parciales restantes a ritmo de récord para establecer una nueva marca de 1:43.790, apenas 81 milésimas de segundo más rápido que un Rossi que enmendó en la clasificación oficial todos sus "defectos" de los entrenamientos libres. En tercera posición arrancará Márquez.