Cuatro de los diez atletas más rápidos de la historia en esta distancia formarán entre los cerca de 40.000 participantes que tomarán la salida en la edición número 34 del maratón de Londres. Entre ellos estará el santiagués Pedro Nimo, que confía en hacer un gran papel pese a la elevada exigencia de una carrera en la que Mo Farah da el salto a la larga distancia y en la que nada más ni nada menos Gebreselassie hará de liebre.

El keniano Wilson Kipsang, que en septiembre dejó el récord del mundo en dos horas, tres minutos y 23 segundos, es el rotundo favorito para hacerse con la prueba, si bien algunos de los mejores maratonianos de todos los tiempos estarán atentos a cualquier flaqueza del plusmarquista.

El ugandés Stephen Kiprotich, oro en los Juegos Olímpicos de Londres y en el último Mundial de Moscú, tratará de cruzar la meta el primero, lo mismo que el etíope Tsegaye Kebede, ganador en Londres hace un año, y el keniano Emmanuel Mutai, el hombre que más rápido ha corrido la prueba (2h04:40., en 2011).

También buscará sus opciones el joven etíope Tsegaye Mekonnen, que con 18 años batió en enero el récord mundial júnior con una marca de 2h04:32., en Dubai.

Todos ellos estarán guiados durante los primeros treinta kilómetros al ritmo que marcará Haile Gebrselassie, uno de los fondistas más laureados de la historia.

A sus 40 años, el etíope tiene la misión de llevar la prueba a ritmo de récord mundial hasta el kilómetro treinta (una hora y 27 minutos) y apartarse allí para que los corredores más jóvenes midan sus fuerzas en los últimos 12.195 metros del recorrido.

Entre los que esperan estar en el grupo de cabeza cuando Gebreselassie les abandone a su suerte a la altura de Canary Wharf, un complejo de negocios a orillas del Támesis al este de la ciudad, se encuentra el británico Mo Farah.

El ganador en los 5.000 y 10.000 metros en los Juegos Olímpicos de 2012 se ha marcado el reto hacer un buen papel en una distancia en la que todavía no ha corrido nunca. Algunos de sus rivales han expresado dudas sobre la posibilidad de que Farah les plante cara después de que el británico acabara desfallecido la media maratón de Nueva York el 16 de marzo.

Con todo, Farah, de 31 años, se ha mostrado convencido en los últimos días en que pude batir el récord británico de maratón que Steve Jones dejó en dos horas, siete minutos y 13 segundos en 1985.

Entre ellos, Pedro Nimo también sueña con un día de fiesta. Ante tal cartel, asume la posibilidad de correr en solitario. Pero no teme a la soledad. Se ha preparado a conciencia y acude con la intención de firmar un registro en torno a dos horas y trece minutos.