En un equipo en el que repetirán nueve jugadores de la pasada temporada la llegada de Manu Martínez, Gonzalo Carró y Alberto Casares rejuvenece al Academia Octavio y le da un carácter mucho más gallego. Se trata de tres jugadores de la tierra -Martínez llega del Novás, Casares del Cisne y Carro regresa al club del que salió antes de jugar el pasado año en el Alcobendas- para los que el salto al cuadro académico supone todo un impulso en sus jóvenes carreras deportivas.

Así lo explicó Quique Domínguez en la presentación de los tres jugadores celebrada ayer. El técnico pontevedrés explicó que se trata de jugadores diferentes "con virtudes y también defectos que deben mejorar y con esa idea vienen aquí". Para el entrenador "después del descenso era importante meter ilusión, ambición y ganas en el vestuario para que el equipo tuviese ese nuevo impulso. Ellos, con su juventud y el salto de categoría que dan, creo que nos contagiarán ganas, hambre y se las transmitirán a jugadores veteranos que seguro les van a ayudar mucho en su formación como jugadores".

Domínguez también destacó que una de las razones de peso por las que se incorporan al equipo es su calidad: "Tienen unas condiciones se pueden adaptar muy bien a la idea que tenemos en el Octavio de juego. Los primeros línea (Manu Martínez y Alberto Casares) son gente muy dinámica, alegre y esa son nuestras señas de identidad. Gonzalo, al ser pivote, tiene otras virtudes. Ojalá nos ayuden a acumplir el objetivo que no es otro que volver a Asobal tan pronto como podamos".

Los jugadores no ocultaban su ilusión por llegar al Octavio. Carró, que regresa al equipo del que salió hace poco más de un año, dijo que "las cosas podían haber ido mejor en Alcobendas y al acabar el año me planteé qué hacer, Quique me llamó ensegida, conozco bien el club, me han tratado bien y el proyecto era muy interesante para volver".

Para los otros el cambio es mayor. Manu Martínez comentó que "vengo por dar un salto de calidad. Hay diferencia entre el Novás y el Octavio, La referencia que tengo son muy buenas, tanto del juego que busca Quique como de los jugadores de la pantilla, gente con experiencia de los que me gustaría aprender. Es una gran oportunidad llegar al Octavio". Parecidos sentimientos tiene Alberto Casares, que llega procedente del Cisne. Dice que "vengo de jugar en Primera Nacional cuatro años y esto es un salto importabnte. Gran oportunidad, trataré de aprender de gente con mas experiencia y calidad y trataré de hacerlo lo mejor posible".