El Aldasa Amfiv iniciaba la segunda vuelta de la competición en la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas con dudas en lo deportivo después de haber encajado tres derrotas de forma consecutiva pero, sobre todo, tras una complicada semana en la que el club vigués, ante la falta de una respuesta del Concello al apoyo solicitado para organizar la Copa André Vergauwen, tuvo que renunciar a acoger la fase final del segundo torneo continental en importancia. Además, se enfrenta a una dura sanción por parte de la IWBF-Europa.

A la espera de noticias en este sentido, el Aldasa se dio una alegría sobre la pista de Bouzas al ganar al Clínicas Rincón Amivel (64-55), en un choque en el que el conjunto de Julio Bernárdez dominó a partir del segundo cuarto.

Casi sin darse cuenta, el Aldasa se encontró peleando por recuperar el basket average particular ante el Amivel. El 51-43 encajado en Málaga estaba igualado al inicio del último minuto (62-54) pero una nueva canasta de Morteza daba un premio adicional al Aldasa (64-54, min.39).