El Balonmano Porriño visita al Castro Urdiales con la intención de ganar su partido de la décimo primera jornada, lo que supondría, en caso de conseguirlo, haber vencido a domicilio a los tres equipos que se encuentran debajo de las porriñesas en la tabla clasificatoria.
Hay determinados encuentros a lo largo de la temporada que tienen un sabor especial, ya sea por la entidad del rival y la posibilidad de medirse a uno de los conjuntos más potentes del mundo o ya sea por la importancia de los puntos en juego al tener enfrente a un rival directo. A este último tipo pertenece el encuentro que esta jornada disputará el Balonmano Porriño a partir de las 19.00 horas en Castro Urdiales. Porque las cántabras ocupan la antepenúltima posición con dos puntos menos que las porriñesas. Una victoria de las de Abel Estévez supondría un auténtico puñetazo sobre la mesa en la lucha por la permanencia después de haber ganado ya, y a domicilio, al último clasificado (Feve Gijón 19-23) y al penúltimo (Kukullaga 17-22).
Sin embargo, el técnico del Balonmano Porriño no quiere que su equipo se obsesione con esta circunstancia. Estévez también había concedido una notable importancia al choque que supuso el regreso después de casi dos meses de inactividad de las porriñesas a la competición enfrentándose el pasado sábado ante el Elche Mustang y la presión le jugó una mala pasada a las suyas, que perdieron con claridad (17-32). Y no quiere que se repita la historia.
Además, esta semana Estévez pudo contar ya con la incorporación de la nueva jugadora porriñesa, María Cadens, y en la sesión del jueves veía cómo Ana Rodríguez se reincorporaba al grupo tras dejar atrás el golpe en la rodilla que sufrió en el compromiso ante el Elche.
Pabellón: Castro Urdiales. Hora: 19.00.
