La contractura muscular que Quique de Lucas sufre en su gemelo izquierdo le está dando más problemas de los esperados. Cuando el viernes pasado se lesionó en el entrenamiento previo a viajar a Villarreal, todos pensaron en el Celta que el delantero se recuperaría pronto y que el martes o el miércoles se reincorporaría al trabajo con el resto de la plantilla para preparar el partido del sábado. Ayer tampoco pudo trabajar con sus compañeros. Tras la sesión de entrenamiento en A Madroa, Paco Herrera se mostró pesimista. El técnico apuntó que existen "un 90 por ciento de posibilidades" de que De Lucas no pueda jugar ante el Granada. Aspas, que realizó una gran actuación ante el filial del Villarreal, es el máximo aspirante a suplir al lesionado.

La contractura muscular en el tercio medio del sóleo izquierdo que el viernes le diagnosticaron los médicos a De Lucas era más grave de lo imaginado. De hecho, el lunes le realizaron una ecografía en la que se le detectó un edema, por lo que el martes sólo apareció unos minutos en el campo de entrenamiento para corretear junto al recuperador Pedro Docampo.

Se tenía la confianza de que ayer pudiese trabajar a mayor ritmo e incluso no se descartaba que pudiese participar con sus compañeros en parte del entrenamiento. Pero como el día anterior, De Lucas salió al campo para realizar suaves carreras, mientras el resto de la plantilla era sometida a una intensa sesión de trabajo, que incluyó ejercicios físicos.

Paco Herrera se cercioró entonces de que el atacante de L´Hospitalet contaba con pocas probabilidades de actuar el sábado ante el conjunto granadino. El técnico dejó abierta a la esperanza una pequeña rendija, pero con poco convencimiento.

"Tiene un noventa por ciento de posibilidades de no jugar", reconoció Herrera cuando abandonaba las instalaciones deportivas de Candeán. Al equipo sólo le restan dos sesiones de entrenamiento (la de esta mañana en Balaídos es muy suave e incluye baño y masaje) antes de afrontar la novena jornada de Liga.

Por lo tanto, como ocurrió ante el Villarreal B, el técnico del Celta ha de buscar un sustituto para uno de los jugadores más en forma del equipo en las primeras jornadas: suma tres goles y cuatro asistencias.

Ante el Villarreal B, Herrera apostó por Papadopoulos como compañero de David Rodríguez en el ataque. La combinación no funcionó porque el griego es un jugador más estático, sin tanta velocidad y desmarque como De Lucas.

Herrera acertó, en cambio, dándole entrada a Iago Aspas en el segundo tiempo. El delantero de Moaña revolucionó el partido con un magistral taconazo que supuso el empate para el conjunto vigués. Aspas irrumpió en el campo junto a Roberto Trashorras, que se había quedado en el banquillo. Ante el Granada, el centrocampista lucense puede recuperar la titularidad porque Joan Tomás no realizó una buena actuación en tierras castellonenses. Y así lo reconocía ayer el gerundense: "No fue un gran partido individualmente. Pero seguiré trabajando para hacerlo lo mejor posible. Esta semana, a ver qué opina el míster. Aceptaré lo que decida".