Se aproxima el final del plazo fijado por el presidente de la Escudería Rías Baixas, Fernando Mouriño, para dilucidar si este año organizan su tradicional rally, incluido en el Campeonato de España. La escudería había pensando anunciar la suspensión el pasado martes pero el secretario xeral para o Deporte de la Xunta, José Ramón Lete, y el teniente de alcalde, Santi Domínguez, han comprometido su ayuda para sacarlo adelante. A la espera de que se concreten esas promesas, los organizadores cruzan los dedos y recolectan adhesiones.
"Es increíble", valora Mouriño sobre los mensajes de cariño que han recibido durante estos días. "Alucinamos". En Facebook se ha creado un grupo de apoyo que ya suma más de 2.800 adeptos. Hay llamadas, correos electrónicos, un flujo constante de "fuerza moral que también nos es muy necesaria para seguir adelante".
Necesaria, pero no suficiente. Los organizadores deben completar el presupuesto y disponer de unos auxilios que les permiten compaginar la prueba con sus actividades laborales. Los políticos han animado a Mouriño a que anuncie que el rally se disputa. Él aguarda a hechos concretos y anuncia: "No podemos esperar más allá del viernes. La Federación espera noticias". La cuenta atrás ha comenzado.
