El Octavio Pilotes Posada 2009/2010 ya está en marcha. El conjunto dirigido por Quique Domínguez comenzó ayer en el pabellón municipal de As Travesas los entrenamientos de pretemporada, con vistas a llegar en la mejor forma posible al primer encuentro de liga, el 12 de septiembre ante el CAI Aragón.

El conjunto vigués se presenta este año con ocho caras nuevas respecto a la pasada temporada- Lamariano, Kobin, Rudovic, Stefanovic, José Costa, Valero Rivera, Pavlovic y Massachs-, jugadores que tendrá que acoplar Quique Domínguez al sistema de juego del Octavio.

"Son bastantes incorporaciones pero tenemos tiempo de sobra para adaptarlos a nuestro sistema y estoy convencido de que lo vamos a conseguir. Lo bueno es que tenemos dos jugadores por puesto", confesó Domínguez.

El preparador considera por una parte positivo realizar cambios en la plantilla, ya que de esta manera se renuevan las ideas.

"Hacer cambios es una cosa buena porque la gente nueva viene con ilusión y con ganas de hacerlo bien", declaró el técnico.

Una temporada más, el Pilotes Posada buscará el objetivo de la permanencia en la élite del balonmano español, pero Quique Domínguez no descarta nada y reconocer ser "muy ambicioso".

"Está claro que la meta de un equipo como el nuestro es la de buscar la permanencia lo más rápido posible con los equipos que están en nuestra liga particular. A partir de ahí, no renunciamos a nada porque la ambición de estar lo más arriba posible", declaró.

El técnico vigués ha programado para esta pretemporada jornadas diarias de dobles sesiones, en Castrelos por las mañanas y en pabellón por las tardes, con el objetivo de llegar en la mejor forma posible al début liguero en Zaragoza. Para ello, además, el conjunto académico disputará un total de diez encuentros amistosos, el primero de ellos el próximo día 14 de agosto en casa ante el Dunkerque.

Cambio de estilo

Con las bajas de jugadores clave en el conjunto vigués respecto a la pasada campaña, y los nuevos refuerzos llegados, Quique Domínguez reconoce que puede modificar el estilo, de juego, al cambiar completamente la primera línea del equipo.

" Es cierto que ha habido muchos cambios en la primera línea, pero tiene cosas buenas como que ahora mejoraremos mucho en el tiro exterior, lo que obligará a cambiar algún concepto de juego que se irán entrenando durante este próximo mes", confiesa Domínguez.

El técnico considera clave el puesto de central, para el que contará con Rubén Montávez e Iván Infestas, de los que espera mucho.

"Tengo mucha confianza en ellos. Son jugadores que han madurado mucho y tienen que dar mucho equilibrio al equipo", concluyó el técnico.

Quique Domínguez se muestra muy ilusionado ante su octava temporada al frente del Pilotes Posada y espera tener una ca mpaña tan cómoda como la del año anterior, donde los vigueses a punto estuvieron de clasificarse para disputar competición europea con uno de los presupuestos más ajustados de la categoría.