Abel Caballero, alcalde de Vigo, volvió a alertar ayer sobre el peligro de que el Celta desaparezca. "Si no se hacen bien las cosas el riesgo es que la próxima temporada no haya Celta". El regidor vigués hizo estas declaraciones durante la XI Convención de Peñas del club vigués, que ayer concluyó en O Rosal. Caballero reiteró su "profunda preocupación" por la situación de la entidad futbolística y pidió a la afición que se involucre en la salvación del club.

"Todos debemos ser consientes de lo que está pasando, que es muy importante para el futuro", aseguró. El alcalde volvió a referirse ayer a la renovación del convenio sobre la cesión de Balaídos e insistió en que supone "poner por escrito la colaboración que hay en la actualidad entre ambas entidades" y que "no le costará ni un euro a los ciudadanos".

En su alocución, el regidor desveló que le transmitió al alcalde de Ferrol "mi disgusto por el descenso del Racing" y también la preocupación por la situación del Celta al Gobierno de Galicia. Abel Caballero insistió: "Todavía no se ha encontrado la solución y por eso todo este proceso es preocupante".

Por su parte, la presidenta de la Federación de Peñas del Celta, Begoña Vázquez, pidió unión al celtismo en estos momentos de dificultad. "Somos un sentimiento y jamás abandonaremos al equipo", espetó. Vázquez, no obstante, reclamó al presidente, Carlos Mouriño, y al consejo de administración "un esfuerzo" para que el Celta vuelva a la Primera División. "Si trabajan con honradez seguro que lo lograrán", afirmó. La presidenta de las peñas concluyó: "Queremos y deseamos la unión del celtismo. Tenemos que ir todos de la mano, pero no sólo con una sino con las dos. Hay que estar en los momentos buenos y también en los malos. El Celta se lo merece".