El Celta, en la mejor versión actual de ambos conjuntos, supera al Deportivo en dinámica de juego. Existen pocas discrepancias al respecto. El conjunto celeste ha moldeado su estilo a lo largo de varias temporadas, casi desde Eusebio Sacristán, con coherencia en política, contrataciones y relevos. Una apuesta que ha alcanzado su perfección bajo la batuta de Berizzo, un autor especial, diferente al común. El Deportivo se ha movido con mayores sobresaltos y vaivenes, condicionado por sus angustias económicas. En las jugadas a balón parado, sin embargo, esas diferencias conceptuales desaparecen. Las estadísticas validan las impresiones. El Celta sufre a balón parado. El Deportivo respira, al menos en la comparación. Las cifras invitan a los célticos a ahorrarse cualquier concesión al adversario en este aspecto. Ni un córner de más.

Fútbo Avanzado ( @FutbolAvanzado) recopila los datos que retratan la situación. El Celta obtiene el 48,7% de sus goles en jugadas combinativas, de dos o más pases. Sólo Leganés, Atlético, Barcelona y Las Palmas superan ese porcentaje. El Deportivo, en cambio, fía a la combinación el 39,2% de sus tantos, solo por encima de Athletic, Sporting y Granada. Las vías de penetración que escoge cada conjunto son bien distintas. En el Deportivo, el 68,5% de sus pases en los últimos 30 metros son centros al área, el que más en toda la Liga; en el Celta son el 32,5%, en la línea de Barcelona, Las Palmas y Villarreal, los que menos.

El Deportivo compensa esas carencias mostrándose muy peligroso en las jugadas a balón parado, incluyendo en éstas goles de falta directa, tras remate o prolongación al área en faltas y córners, tras rechace en el área o saque en corto. Los blanquiazules son los segundos mejores en este apartado, con un 29%, solo por detrás del Betis (37,9%). El Celta es octavo con un 20,5%, rendimiento en el que le ayudan las ejecuciones directas más que los centros rematados. Wass, Aspas, Díaz y Sisto han anotado siete goles entre las tres competiciones que ha disputado la escuadra.

El Celta apuesta por jugadores con despliegue y clase, pero cortos de talla o sin especial contundencia por alto. Cualidades y defectos suelen estar íntimamente ligados. El Celta encaja un gol por cada 15,7 córners del adversario. Solo Osasuna (12,5) y Las Palmas (14,1) son más frágiles en este aspecto. Al Deportivo le hacen un gol cada 21,5 saques de esquina. El Real Madrid avanza por la Liga sin que nadie la haya marcado de momento en un córner.

Abunda en este línea el porcentaje de goles que cada equipo encaja a balón parado. Un 26,6% en el caso del Celta, solo menos que el Barcelona (34,7%). En el Depor es un 21,4%.

En la producción anotadora que se le exprime a cada saque de esquina no existen tantas diferencias. El Deportivo mete un gol por cada 24,5 córners y uno por cada 9,6 que alcanza a rematar; el Celta, uno por cada 25,5 y uno por cada 12,7 que remata. Los deportivistas figuran como quintos en el escalafón y los celestes, séptimos. Encabeza esta lista de efectividad el Betis (18) y detrás de los verdiblancos, dos especialistas evidentes: Sevilla (20,2) y Real madrid (23,2).

La realidad inmediata refleja esta radiografía que la condensa. El Celta perdió contra el Villarreal en un saque de falta. Bergantiños ajustició al Barcelona cabeceando un córner. En el derbi de la primera vuelta Albentosa marcó igualmente de cabeza al rematar un golpe franco. A los célticos les conviene que el balón ruede sin detenerse.