La nueva Lei de Benestar Animal de la Xunta de Galicia ha supuesto la puntilla a un evento que ya no se encontraba en su máximo esplendor, sino que había comenzado un lento declive que, cada vez, era más evidente. Si bien contó con el respaldo de diferentes sectores de la sociedad grovense, en la actualidad, ese respaldo ya no es tan evidente, ni siquiera entre los hosteleros del municipio, donde el sentir general es de "decepción", ya que se cree que este evento dejó a lo largo de su historia "ingentes beneficios económicos" tanto en la isla como en el conjunto de la localidad.
Pero a estas alturas, después de los problemas vividos en los últimos años, "se cae por su propio peso, ya que se trata de un acontecimiento herido de muerte que cada vez atrae a menos tiradores y dispone de menos días de actividad".
La actividad del tiro al pichón en la isla de A Toxa contaba con casi medio siglo de tradición, llegando a reunir en alguna de sus ediciones a más de medio millar de tiradores llegados de toda España. El mes de julio siempre era el elegido para su celebración llegándose a convertir en la tirada del verano por excelencia, además de la de mayor duración que se celebraba en todo el territorio nacional, según los datos de la Federación Española de Tiro a Vuelo. La mayor parte de sus participantes eran gentes de alto poder adquisitivo, que visitaban la isla de A Toxa prácticamente todos los años.
La desaparición del tiro al pichón coincide con la preocupación de la hostelería local sobre la caída como destino turístico del emblema que siempre fue A Toxa.
