Walter tiene quince años de experiencia conduciendo camiones en Perú, pero aquí tiene que recibir formación para conseguir el certificado indispensable para trabajar en la Unión Europea. Junto a decenas de compatriotas ha recalado en Galicia. Todos son conductores experimentados, reclutados por una empresa que busca paliar el grave déficit de profesionales que hay aquí. Han ido a Perú porque los trámites de extranjería son más ágiles. Trabajo no les va a faltar. Solo en España hay un déficit de 20 mil conductores profesionales, 400 mil en Europa. Cada uno ha tenido que reunir unos 4 mil euros para pagar su formación y su estancia. En Baños de Molgas buscan una nueva vida. Así se cumpliría otro de los objetivos que es repoblar zonas como esta que necesitan de nuevos vecinos.