Los dueños de los animales consideran necesario poner en marcha campañas de información y avisos antes de comenzar a denunciar infracciones para que no cojan por sorpresa a nadie. Lamentan que las restricciones contempladas en la Ley de Bienestar Animal sean tan severas, como una multa de 500 € por dejar atado al perro atado unos pocos minutos en la puerta de un negocio, cosa que para algunas personas hace replantear incluir a los canidos en sus tareas del día a día. Lo que en última instancia podría llevar a más abandonos y pérdida de interés, según expertos consultados.