Cada vez son más las personas que buscan llevar un estilo de vida saludable. A menudo asociamos el cuidarse más con llevar una alimentación sana y equilibrada y hacer deporte pero no todo se queda ahí. Existen muchas rutinas que forman parte de nuestra día a día que tiene efectos muy nocivos para nuestra salud aunque parezcan inofensivos. No tendrán un efecto inmediato pero a la larga pueden hacer que tengas un aspecto mucho más envejecido.
No utilizar crema solar a diario
La excesiva exposición al sol es muy peligrosa. Puede provocar cáncer de piel y aumenta el riesgo de envejecimiento ya que la luz ultravioleta hacen que nuestra piel se vuelva más frágil y flácida. Y aunque en las pieles jóvenes las fibras se regeneren con más facilidad, con el paso de los años, las personas que se expongan de manera excesiva al sol, parecerán más mayores.
Ausencia de relaciones sociales
Hay ciertas investigaciones que demuestran que aquellas personas que cuentan con lazos sociales más fuertes tienen más posibilidades de vivir durante más tiempo que aquellas que tiene dificultades para relacionarse con otros.
Dedicarle mucho tiempo al teléfono móvil
El tiempo que pasamos con el móvil se ha convertido en uno de los grandes problemas de nuestro siglo. La media de horas que pasamos delante del móvil podría llegar a las ocho horas, lo que hace muy difícil escapar de las luces azules, que se ha demostrado que cambian las células de la piel y causan un envejecimiento prematuro.
Una mala actitud
La actitud ante las situaciones a las que tenemos que hacer frente es muy importante. Tomarse los problemas con exceso de negatividad o afrontar las situaciones con una actitud demasiado adulta puede tener consecuencia muy negativas en las fases del envejecimiento.
Una mala alimentación y la ausencia de ejercicio físico
Estos dos aspectos son importantes a cualquier edad. Es imprescindible adoptar hábitos de vida saludables para evitar que nuestro cuerpo se deteriorare más rápido. Tampoco no nos podemos olvidar de una buena hidratación, esencial para tener una buena salud.
El estrés
Altera el sueño, daña la vista y hace que tengamos mal aspecto. A todo este desgaste emocional hay que añadir la aceleración de los signos del envejecimiento como las patas de gallo, líneas finas en la frente, manchas en la piel y círculos oscuros debajo de los ojos.
El consumo de alcohol y tabaco
Ambos están relacionados con signos visibles de envejecimiento físico y te hace parecer más mayor de lo que realmente eres. Como en todo, los excesos no son buenos pero beber entre leve y moderadamente no se asocia con un envejecimiento biológico.
