Nada se produce en el vacío, tampoco las tragedias como la muerte el jueves de la directora de fotografía Halyna Hutchins durante el rodaje del wéstern ‘Rust’. La filmación se había visto envuelta en quejas y protestas por precarias condiciones de trabajo y falta de seguridad, incluyendo en el manejo de las armas de atrezo como la que empuñó Alec Baldwin en el incidente fatal, armas con las que se habían producido ya al menos un par de casos previos de descargas accidentales.

Ha sido el diario ‘Los Angeles Times’ el que, hablando con fuentes del rodaje, ha retratado con más detalle los problemas que plagaban una película de bajo presupuesto para los estándares de Hollywood en la que, según denuncian los trabajadores, los productores estaban abaratando costes y metiendo prisas. Cayeron en saco roto esas protestas y quejas y las demandas de mejoras, que en muchos casos coinciden con las que han estado enarbolando los trabajadores de Hollywood afiliados al principal sindicato de técnicos que recientemente han estado a punto de ir a la huelga.

El sábado anterior a la tragedia, por ejemplo, se produjo una descarga accidental del arma en el ensayo de una escena en la misma iglesia de madera en el rancho Bonanza Creek donde el jueves ocurrió la tragedia. En aquel caso manejaba la pistola el doble de Baldwin y no hubo víctimas pero no era el primer incidente con las armas en el rodaje y creció la preocupación.

El jueves, unas seis horas antes de la tragedia y hartos de condiciones que consideraban insostenibles y que incluían también problemas en los cobros o incumplimiento de promesas de alojamiento cerca del rodaje, seis operadores de cámara y asistentes del departamento de fotografía que dirigía Hutchins abandonaron el rodaje. Ella misma había abogado porque se mejorara la seguridad de su equipo, pero sin éxito. Y los productores, que aún tenían en la agenda nueve días más de un rodaje que ahora ha sido paralizado indefinidamente, simplemente sustituyeron a esos trabajadores, miembros de un sindicato, por personal local no afiliado.

Se conocen también más detalles de cómo sucedieron los hechos. Según un afidávit preparado por la oficina del ‘sheriff’ del condado de Santa Fe para lograr autorización judicial para inspeccionar el rancho, la responsable de armas de la película, Hannah Gutierrez, de 24 años e hija de un veterano armero, para la que Rust era su segundo largometraje, había dejado tres armas en un carrito fuera de la iglesia. El asistente del director Dave Halls cogió una de esas armas, se la llevó a Baldwin y le dijo “cold gun”, la frase que se usa en el argot para indicar que el arma está descargada tanto de munición real como de fogueo.

No se sabe cómo pudo producirse ese fatal error, porque el arma sí estaba cargada. Lo que sigue siendo “un foco de la investigación”, según el portavoz del ‘sheriff’, Juan Ríos, es saber “qué tipo de proyectil era”, si una bala real (aunque esa munición está absolutamente prohibida en todos los rodajes en EE UU) o de fogueo, y “cómo llegó allí”.

‘Los Angeles Times’ también ha detallado que Hutchins y Joel Souza, el director, estaban junto a un operador de cámara preparando el plano y no se habían retirado aún a la zona donde normalmente se sigue la filmación a través de monitores. Baldwin sacó una vez el arma de la cartuchera sin incidente. Cuando repitió la acción, no obstante, el arma se disparó y el proyectil impactó cerca del hombro y atravesó a la directora de fotografía, que cayó inmediatamente al suelo, y alcanzó luego al director, que resultó herido pero el mismo jueves fue dado de alta del hospital.

Lo sucedido ha desatado una ola de denuncia sobre medidas de seguridad que en el caso de ‘Rust’ claramente se incumplieron, pero también de debate sobre el uso de armas reales en los rodajes estadounidenses, que suman complicaciones cuando se trata de armamento de época. Además, ya ha provocado algunas acciones concretas. Los responsables de ‘Rookie’, una serie de policías de ‘ABC’, anunciaron el mismo viernes que dejarán de usar armamento real y añadirán los efectos visuales en posproducción.