| La compañía que elabora las míticas guitarras Gibson, con las que han tocado desde intérpretes de la talla de Elvis Presley o Keith Richards, entre otros muchos icónicos artistas, presentó una petición para declararse en bancarrota junto a un plan para reflotar la empresa en el futuro. Con un volumen de ventas anuales de alrededor de 170.000 guitarras en más de 80 países, Gibson realizó formalmente este reclamo en el tribunal de bancarrotas del Distrito de Delaware para protegerse de sus acreedores que, según propone en su plan de recuperación, en parte podrían pasar a convertirse en accionistas. La entidad citada realizó la petición de bancarrota argumentando que ya goza del apoyo de muchos de sus acreedores y también de prestamistas para acometer el plan que permitiría, según la empresa, su supervivencia.