Fue David Bustamante quien cantó primero la noticia largamente esperada: el divorcio de la actriz Paula Echevarría era un hecho consumado. Mientras ella se alejaba del huracán mediático cruzando el charco para irse a México por motivos de trabajo, el cantante cántabro aparecía en la revista "¡Hola!" confirmando que la pareja había firmado la ruptura legal. El adiós oficial. El final de un romance que dio mucho que fotografiar antes, durante y después del mismo.

Pero Echevarría no se calló en América. Durante un acto promocional de una conocida marca de joyas, la actriz no escurrió el bulto y se refirió a Bustamante usando un término que, hasta ahora, nunca había salido de sus labios: "exmarido".

Sus palabras exactas fueron: "México es un país que me gusta por la relación que tenía anteriormente con mi exmarido David Bustamante, que ha venido mucho aquí. Siempre he tenido mucha relación con el país a distancia, pero siempre lo miro con mucho cariño". La pregunta era inocente (protocolaria: cómo la recibe el país azteca) pero la respuesta parecía pensada, y muy pensada, para convertirse en algo parecido a una réplica, o coda, a la entrevista en exclusiva que concedió su "ex" a la revista del corazón. Echevarría matizó que su relación con el cantante es buena y aseguró que en su próxima visita a México irá acompañada de su hija Daniella.