Se despidió ayer la explosiva Cristina Rodríguez de "Cámbiame" (supuestamente de forma temporal), el programa que ameniza la sobremesa de Telecinco. Y que sí, quizás ha sufrido demasiados cambios en los últimos tiempos. Se va una mujerona de rompe y rasga, de excesos, de escotazos. Alertó de que espera que solo sea un mes porque si no le da un síncope. Nada más acabar la frase, el Pelayo Díaz se tiró en sus brazos, hecho un auténtico mar de lágrimas.

El testigo de Cristina lo pilla un tal Juan Avellaneda que de primeras, no nos gusta nada. Juan Avellaneda cambia además las tornas de los sillones. Hasta ahora la batalla del estilismo se libraba entre dos mujeres, Cristina y la dulce Natalia Ferviú y Pelayo Díaz, ahora tenemos dos tíos y solo una estilista. Esto nos cambia el formato y seguro que a Pelayo tampoco le mola, lo intuimos. ¿Dejará de ser Pelayo el chico consentido del programa?

Si algo sabemos los seguidores de "Cámbiame" es que en este microclima creado en el programa es difícil encajar a los nuevos, ellos mismos, los estilistas reconocieron que no se lo pusieron fácil al principio a Carlota Corredera, que reconoció ante las cámaras que los primeros días de trabajo en el programa fueron "duros". A ver Avellaneda cómo las pasa, y a ver si hay algún concursante que le elija porque hay que reconocer que el chaval juega en total desventaja. Vamos. que ahora mismo no le conoce ni el Tato, en televisión por lo menos, y que si algún otro estilista pulsa el botón rojo del cambio nadie va a elegir a un desconocido pudiendo ponerse en manos de un Pelayo Díaz o una Natalia Ferviú, a los que la gente adora.

Avellaneda se presentó ayer en "Cámbiame", pero ya ha dado algún titular por ahí en los que parece ir pidiendo guerra.