El truco del vaso y el vinagre para limpiar el lavavajillas que se ha hecho viral por sus sorprendentes efectos

Un remedio casero que te servirá para que tus platos salgan más relucientes que nunca

Limpiando un lavavajillas

Limpiando un lavavajillas

 El lavavajillas es ya uno de los electrodomésticos más usados para muchas familias. Facilita mucho las tareas de limpieza y nos permite despreocuparnos de dedicar tiempo a una de las prácticas más engorrosas del hogar. Nos ayuda a disfrutar de una vajilla limpia sin tener que invertir tiempo frotando.

Puede que alguna ocasión hayas vaciado tu lavavajillas y hayas comprobado que los platos o cubiertos han salido sucios. Esto puede deberse a que no está todo lo limpio que debería. Es muy importante que de vez en cuando lo desinfectes y hay un trucazo que está arrasando y que te ayudará a hacerlo muy rápido. Para ponerlo en práctica solo necesitas un vaso, bicarbonato sódico y vinagre de limpieza.

Espolvorea el interior de tu lavavajillas con media taza de bicarbonato sódico. Cubre bien el fondo, las rejillas y el recipiente de los cubiertos. Con esto conseguirás desengrasar y quitar el mal olor del interior del electrodoméstico.

El siguiente paso es llenar un vaso hasta arriba con vinagre de limpieza y colocarlo en el centro de la rejilla de arriba del lavavajillas. Este gesto además de desinfectar, limpiará los depósitos de cal acumulados en las tuberías y aspas. Para que ambos ingredientes hagan su función, pon en marcha un ciclo de lavado a la temperatura más alta que puedas, para potenciar la acción de ambos ingredientes.

El resultado es un lavavajillas sin grasa ni malos olores, además de completamente desinfectado. Por último saca el vaso, comprueba que no haya restos de bicarbonato e inicia un ciclo de lavado solo con agua para enjuagar cualquier residuo.