Iván Mariñas, uno de los dos concursantes gallegos de la octava edición de MasterChef ha tenido que conformarse con el tercer puesto del concurso de cocina de TVE, que anoche despedía la edición que más concursantes había convocado y que se vio interrumpida por la irrupción del coronavirus.

El entrenador personal de A Coruña, que quiso homenajear a Galicia con su menú final, triunfó con su propuesta pero no convenció a los paladares de un exigente jurado formado por Joan Roca y los tres miembros del jurado, que sí hallaron en los platos de Andy García y Ana Iglesias las ideas y las técnicas merecedoras del máximo reconocimiento en MasterChef. Premio que se llevó la joven empresaria de 24 años ante la presencia de sus familiares y los exconcursantes de esta última edición.

"He conocido a un Iván original, gracias por el concurso que has hecho, eres el capitán de este Masterchef". Con esas palabras se despedía Jordi Cruz del gallego después de reconocer que, pese a los tiras y aflojas en entregas anteriores, sabía que el entrenador personal de 38 años que ejerce en Ourense iba a caerle bien y reconocer su tenacidad. Lo cierto, es que de los tres finalistas, Iván fue el último en sumarse a la batalla final.

Antes de cocinar unas navajas, un salmonete y una tarta de Santiago con helado de castañas, Iván Mariñas tuvo que enfrentarse a dos pruebas que la abriesen la puerta definitiva a la gran final. Primero, un cocinado siguiendo las instrucciones de Martin Berasategui con el que convenció pero perdió ante su gran rival, Andy, por pequeños matices.

La segunda prueba, la de exterirores, arrancó en El Bohío, el restaurante de Pepe Rodríguez en Illescas y que encendía los fogonos después de cuatro meses cerrado como consecuencia de la pandemia del coronavirus y las medidas del estado de alarma. Restaurante al que, por cierto, ha invitado a Iván a formarse y en el que presentó un menú, combinación de la tradición y vanguardia que caracterizan una cocina que, sorprendió a los aspirantes, quienes le atribuían una propuesta mucho más clásica.

Los comensales invitados para degustarlo fueron ganadores y finalistas de 'MasterChef Junior', que comenzó a emitirse en 2013, de forma que los seguidores del programa pudieron comprobar que los pequeños de las primeras de sus siete ediciones habían sobrepasado ya la mayoría de edad.

Luna y su fracaso con el postre -asiático, basado en un café típico de Cartagena (Murcia)- se quedaron fuera del trío de duelistas, lo mismo que Alberto, "caballito ganador" de Cruz pero que se pasó con la cocción de unas gambas. Lo que sí se han llevado ambos es una relación de pareja. Iván, el favorito de Pepe Rodríguez y que por tanto 'jugaba en casa', ganó la ansiada plaza para la gran final con sus réplicas del gazpacho de aceituna y de la secuencia de atún de su mentor.

Ana Iglesias, ganadora de 'MasterChef 8'

La ansiada victoria de Iván en MasterChef no pudo ser. El nombre que salió de las bocas del jurado -tal como había filtrado Saray (expulsada con polémica este año)- fue el de la joven Ana Iglesias, que con un menú de homenaje al origen argentino de su familia despidió una edición marcada por la pandemia del coronavirus. "Los sueños se cumplen", ha dicho la ganadora al obtener el título, que comporta la publicación de su libro, un máster en el Basque Culinary Center y 100.000 euros en metálico.

"Los sueños se cumplen", ha dicho la ganadora al obtener el título después de cocinar un menú de homenaje al origen argentino de su familia. En una edición en la que dejó huella la veterana Juana por su humildad y dominio de la cocina tradicional -como invitada en la final anunció que publicará un libro de "cocina económica y de aprovechamiento"- Ana se impuso en la primera final a tres de los ocho años del concurso, con un menú que evocaba sus dos pasiones: la cocina y la joyería.

En una edición en la que dejó huella la veterana Juana por su humildad y dominio de la cocina tradicional Ana se impuso en la primera final a tres de los ocho años del concurso, con un menú que evocaba sus dos pasiones: la cocina y la joyería. Comenzó con un aperitivo en dos secuencias compuesto por ostra aliñada con grasa, perla de su agua y aire de champán, y consomé de jamón con aire de melón; continuó con un pichón con pasta wanton, cremoso de sus interiores y puré de cerezas, del que Joan Roca, del triestrellado El Celler de Can Roca (Girona), dijo que era "un plato tres estrellas Michelin", y cerró con un alfajor deconstruido en homenaje al origen argentino de su familia.

Iván Mariñas, en cambio, deberá conformarse con un curso de ocho semanas de técnicas de vanguardia en el Basque Culinary Center y se despide de MasterChef como uno de los concursantes de Galicia mejor clasificados en la historia del programa. Dos mujeres, Ketty Fresneda y Teresa Abalde, lo adelantan al haber quedado ambas en la segunda posición de sus respectivas ediciones.