El pasado abril la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, dictaba una sentencia en la que, en virtud del veredicto de culpabilidad emitido por el jurado popular, imponía 41 años de cárcel al violento delincuente vigués José Luis Luna Pereira por el asesinato de un joven de 23 años en la playa de Arealonga de Chapela (Redondela) durante la noche de San Juan de 2017. La defensa recurrió ese fallo judicial y la vista de apelación para revisar el caso tuvo lugar ayer en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). La abogada del condenado rebate la existencia del delito de tentativa de homicidio a los dos policías nacionales que aquella madrugada lograron detener a su cliente y pide una rebaja de la condena. Asimismo, solicita la aplicación de tres circunstancias eximentes. La Fiscalía y la acusación particular, por su parte, solicitaron que se desestimen estos alegatos y que se confirme en su totalidad la pena impuesta por la sala viguesa. El acusado estuvo presente en la vista y, tras las exposiciones de las partes, afirmó en sala no mostrarse conforme con lo dicho por la acusación pública y dijo que todo era una "pantomima".

Concretamente, José Luis Luna fue sentenciado a 41 años de cárcel por el delito de asesinato del joven Daniel Beltrán por un disparo en el corazón y a quemarropa, por otro de asesinato en grado de tentativa al chico que acudió a auxiliar a la víctima y por intento de homicidio a los policías. Asimismo, se le impuso un delito más de tenencia ilícita de armas. En la vista, junto a los abogados de la defensa y la acusación particular, intervino en representación de la Fiscalía el fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes.

Según afirmó la letrada defensora María José Rodríguez en declaraciones a los medios de comunicación, su recurso busca rebajar en cinco años la condena al entender que "no hubo tentativa de homicidio" hacia los agentes que intervinieron en la detención, ya que "hubo contradicciones en la declaración de ambos". "No existió prueba de cargos suficiente porque había muchas contradicciones entre las declaraciones de los distintos policías", explicó. La jurista solicita además que se apliquen las eximentes, o subsidiariamente atenuantes, "de alteración física, intoxicación etílica y cuadro de abstinencia". El jurado no apreció ninguna de estas circunstancias en los actos del delincuente vigués la noche de San Juan.

Por su parte, el abogado de la acusación particular, Guillermo Presa, detalló en relación a las eximentes que solicita la defensa que "no se consiguió acreditar que el procesado tuviera sus facultades afectadas ni por drogas ni alcohol" en el momento de los hechos. Así, defiende que la condena de la Sección Quinta de Vigo es correcta, "que no es posible reducirla ni anularla", y que se deben mantener los 41 años de cárcel para el condenado. La Fiscalía también solicitó en la vista que se confirme la pena impuesta al sentenciado el pasado abril.

Los hechos ocurrieron durante la fiesta en la playa de Chapela con motivo de la festividad de San Juan. José Luis Luna acudió allí con un potente revólver con el que disparó a quemarropa, de forma sorpresiva y en el pecho al joven, que le había llamado la atención porque estaba orinando encima de unas chicas que estaban en el arenal. Después, trató de asesinar también al chico que acudió a auxiliar a la víctima.