Una denuncia en Andalucía que ha llevado a los investigadores... hasta la provincia de Pontevedra. Un juzgado de Málaga se hará cargo de la investigación por la presunta comisión de un delito contra la propiedad intelectual tras descubrir una mujer de esa ciudad que en una popular página web se estaban vendiendo sin su consentimiento temarios y materiales documentales registrados a su nombre, relativos a las oposiciones de enseñanza secundaria. La investigación policial determinó que el titular del número de teléfono que se aportó para las ventas por internet es un vecino de Baiona.

La delincuencia a través de la red está a la orden del día. Aunque en el caso de las ventas el ilícito habitual es la estafa, en este caso lo que es objeto de pesquisas, algo que no es tan frecuente, es un delito contra la propiedad intelectual. Una figura que castiga con penas de prisión y multa a quien, para obtener un beneficio económico, "reproduzca, plagie, distribuya, comunique públicamente o de cualquier otro modo explote económicamente una obra o prestación literaria, artística o científica". Todo ello sin el consentimiento del titular de los derechos de propiedad intelectual.

En este caso la denunciante tenía registradas en Málaga las contestaciones al temario de oposiciones de enseñanza secundaria. Será el Juzgado de Instrucción 2 de esa ciudad el que finalmente se encargue del caso tras dictaminarlo así el Tribunal Supremo, que recientemente tuvo que resolver la cuestión de competencia planteada. Tras descubrirse que el presunto autor está domiciliado en Baiona, el juez andaluz se inhibió en Vigo, recayendo la causa concretamente en el Juzgado de Instrucción número 7. Pero la juez viguesa rechazó la competencia, en virtud del principio de ubicuidad, que se aplica con frecuencia en delitos cometidos a través de internet y que establece que la sala competente es el lugar donde se incoaron por primera vez las diligencias.

El Supremo, en un auto de este pasado 30 de noviembre, y en aplicación de este principio, otorga la competencia a Málaga. En esa resolución se concreta, sobre el caso en sí, que tras recibirse la denuncia de que el temario de las oposiciones se estaba vendiendo en la web Milanuncios, se constató que existencia del anuncio y la "materialización" de esas ventas a través de internet, lo que dio lugar a "multitud de operaciones" en distintos lugares de la geografía española. La Policía descubrió que el teléfono que se aportaba para esas ventas era de un vecino de Baiona.