Vigilancia Penitenciaria activó ayer el protocolo de suicidios, como establece la normativa en este tipo de casos. El presunto parricida ingresó por la tarde en el centro penitenciario de Teixeiro. Durante unos días permanecerá en la enfermería de la prisión, separado del resto de internos y acompañado por un preso de confianza. Después, evaluarán si lo derivan a un módulo.

El imputado no se cubrió la cara ayer cuando caminó vestido de chándal por el edificio de Nuevos Juzgados de A Coruña ni cuando entró en el coche de la Guardia Civil.