El alpinista vasco Fernando Ossa, donostiarra afincado en Bilbao, falleció tras permanecer dos días aislado en la cordillera de los Andes necesitado de auxilio y en compañía de un compañero de escalada, informó a Efe un amigo de los montañeros.

Su compañero, Paco Vicario, vecino de la localidad vizcaína de Karrantza, consiguió bajar por su propio pie y se encuentra de camino al pueblo más cercano, según la misma fuente.

El alpinista fallecido participaba en una escalada con otros dos montañeros españoles al nevado Ojos del Salado, considerado el volcán más alto del mundo, que se encuentra en la cordillera de los Andes, entre Argentina y Chile.

A unos 6.500 metros de altitud, Ossa sufrió una indisposición al parecer por mal de altura, por lo que uno de sus compañeros de expedición bajó ayer a pedir auxilio mientras que otro, Paco Vicario, se quedaba con él.

La situación de alarma sobre el estado de salud de Fernando Ossa se conoció cuando el alpinista que descendió de la montaña contactó con las autoridades locales argentinas e informó de que necesitaba auxilio y se encontraba en estado grave.