En la vista celebrada ayer declararon varios testigos de los hechos. Uno de ellos, un hombre que estaba en el cajero retirando dinero cuando, el 2 de agosto de 2012, sucedió el intento de asalto de Travesía de Vigo. "Vi entrar a un hombre con un arma apuntando; me dio un ataque de pánico y salí corriendo", relató, para añadir que en el exterior otro individuo lo cogió "del cuello". "Me dijo que me quedara quieto, sino me rajaba; forcejeamos, pude zafarme, crucé la calle y me escondía tras un coche", contó.

También testificaron dos trabajadores de la sucursal asaltada en diciembre de ese año en A Coruña. "Era mediodía y entraron dos individuos; uno nos apuntó con un arma, a mí y a un cliente, y nos mandó levantarnos", recordó, relatando que uno de ellos era más alto y tenía "marcas" en la cara. "Huyeron sin llevarse nada", agregó este hombre. Una viandante pudo observar después a los ladrones y vio que entraron en un vehículo que les esperaba. "Aquello me pareció extraño y avisé a la Policía", concretó.