Dos menores, alumnos del Instituto de Tomiño, están imputados como autores de un delito de extorsión, por amenazar con ánimo de lucro a un compañero del centro escolar.

La víctima, de 15 años de edad, es un joven estudiante al que supuestamente venían extorsionando y amenazando desde hace tiempo, exigiéndole que cada lunes les pagase una cantidad de dinero con la que, según ellos le decían, evitaría ser víctima de agresiones físicas.

Los extorsionadores utilizaron una red social, a través de Internet, para comunicarse con la víctima y hacerle saber sus intenciones.

El chico amenazado bloqueó la entrada de los dos supuestos agresores a su cuenta, pero los dos compinches consiguieron la complicidad de un tercer compañero del mismo centro que, siguiendo el método de intimidación, con amenazas, continuó martirizando al joven con mensajes por Internet, mientras el chico iba abonando cantidades cada lunes, para evitar que se cumpliesen las agresiones que decían sus acosadores. Para cumplir con los pagos, el joven cogió dinero de sus padres que, al percatarse de lo que sucedía, conocieron por boca de su hijo el martirio que estaba viviendo en manos de los compañeros de Instituto, a los que llegó a entregar hasta 300 euros, en varios pagos.

Los progenitores, que hasta aquel momento no se habían percatado del problema con el que se enfrentaba su hijo cada día, informaron de todo lo ocurrido a la dirección del centro, que tampoco observó ningún comportamiento sospechoso. La dirección dio traslado de todo ello al Equipo de Mujer-Menor (EMUME) de la Guardia Civil, en Pontevedra.

Los dos supuestos autores de las amenazas y extorsión fueron requeridos por el equipo de la Guardia Civil que les identificó para después tomarles declaración en presencia de sus padres. Se les imputa un delito por amenazas con ánimo de lucro. Las diligencias están a cargo de la Fiscalía de Menores de Pontevedra.

El suceso ha originado una gran conmoción en distintos ámbitos de la localidad tomiñesa. El jefe territorial de Educación de Pontevedra, César Pérez Ares, explicó ayer sobre el caso que está a la espera de recibir el correspondiente informe elaborado por la dirección del Instituto, para dar los pasos que correspondan en esta situación.