El niño de diez años que ha estado desaparecido durante dos días declaró ayer que no se había dado cuenta de lo que pasaba porque se lo estaba "pasando muy bien" jugando a la PlayStation en casa de un amigo, vecino suyo de Alcobendas.

El pequeño Daniel, entre preocupado por el disgusto que había dado a su madre y abrumado por la presencia de la Policía y los periodistas, explicó que el pasado día 2 se había encontrado por la calle con su amigo, que es compañero de judo, y decidió irse con él a jugar a su casa "porque tiene muchos juguetes" y en su casa no le dejan pasar tiempo con la Play.

"No me he dado cuenta porque me lo estaba pasando muy bien", ha afirmado Daniel, que en este tiempo ha dicho estar jugando "a la Play, al bingo y a otras cosas", aunque en teoría le había dicho a su madre que iba a casa de su abuela.

Ayer, la madre del otro niño, después de que su novio le alertara de que había visto que por la red social Facebook se estaba buscando a Daniel, decidió llevarlo hasta la puerta de su casa, muy próxima al lugar donde ha pasado estos dos días.

El menor ha relatado que nada más salir ha visto un cartel en el que se alertaba de su desaparición con su fotografía colgado en una farola, y se ha encontrado con varios medios de comunicación al llegar a su casa.

La madre de Daniel, que es viuda y tiene otro hijo de 16 años, confesó que llevaba dos días sin dormir porque no sabía qué podía haber ocurrido, ya que su hijo "tiene sus actividades y no es de quedarse en casa de nadie", y ha reprochado a la madre del otro menor que no le haya comentado que estaba en su domicilio.

"No entiendo cómo una madre tiene a un niño en su casa y no avisa a sus padres", ha dicho, convencida de que si su hijo ha aparecido ahora ha sido por la presión de los medios de comunicación, que dieron la noticia de su desaparición.