No fue un intento de homicidio sino una tentativa de asesinato con alevosía. Esto es lo que sostiene el fiscal después de que se celebrase ayer la primera de las sesiones del juicio contra un vecino de Estribela, Manuel Castro Moureira, acusado de apuñalar a un vecino de Marín, A. S. A., el 12 de julio del pasado año, con el objetivo de acabar con su vida. La Fiscalía ya anunció que este cambio en la calificación conllevará también un incremento de la condena solicitada actualmente, que es de 9 años y medio de prisión, pero que con mucha probabilidad se pudiera situar en torno a los 12 años.

El fiscal jefe anunció a la defensa su intención de modificar su calificación provisional después de escuchar la declaración del acusado, de la víctima de la agresión y de los policías, peritos y forenses que comparecieron ayer ante el tribunal, antes de que se aplazar la vista para citar a un testigo que habría visto la agresión

El procesado niega los hechos, pero la víctima manifestó que le acuchilló en plena calle sin mediar palabra. La rapidez con la que actuaron los médicos fue determinante para salvar la vida del vecino de Marín que recibió la puñalada. Según declararon los médicos forenses, la cuchillada afectó al estómago y al bazo y seccionó una arteria que provocó pérdida de mucha sangre de tal forma que sólo una intervención quirúrgica urgente evitó su muerte por shock hipovolémico.