"Colocar" el patrimonio empresarial decomisado por la Audiencia Nacional al clan Charlín no está resultando fácil. La mayor subasta de bienes procedentes del narcotráfico en España despierta intereses puntuales y los expertos no saben si obedece a cierto temor a hacerse con propiedades de una de las mayores organizaciones del narcotráfico gallego, o a un intento de conseguirlas a precio de ganga mediante las adjudicaciones directas que se abrirán para aquellas propiedades cuya puja quede desierta.

La subasta de seis de las ocho bateas mejilloneras del clan Charlín celebrada ayer en la Delegación de la Agencia Estatal Tributaria de A Coruña quedó desierta. Sólo dos de los parques de cultivo y un barco auxiliar despertaron el interés de los licitadores, especialmente la batea "Mal tiempo", ubicada en el polígono C1 de Cambados. En la puja subió de los 120.000 euros del precio de salida inicial hasta los 142.200 euros que se pagaron finalmente ante el interés de dos ofertantes en hacerse con ella. La concesión del parque finaliza en el año 2012, aunque podría prorrogarse si así lo acuerda la Consellería de Pesca.

La batea "Lustres II" ubicada en el polígono de Vilagarcía se adjudicó en segunda licitación al precio de salida, 90.150 euros, igual que el barco "Varela", adjudicado en 42.750 euros. En este caso la concesión del parque de cultivo caduca dentro de cuatro años.

Esta aparente falta de interés por algunos bienes embargados a los integrantes del clan Charlín condenados por blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico no preocupa a los responsables de la Agencia Tributaria, que resaltan que "se ha perdido el miedo a los Charlín" y destacan que hay buenas expectativas para vender.

Y es que además de los que pujaron y se llevaron la nave industrial de Mar Blanco, dos bateas y el barco, se han recibido numerosas peticiones de información sobre los bienes cuya subasta quedó desierta. Este es el caso de las seis bateas por las que nadie pujó y del pazo de Vista Real. Además del interés del Concello de Vilanova por devolver a los vecinos uno de los inmuebles más emblemáticos adquiridos con dinero del narcotráfico, otras instituciones –como la Diputación– y asociaciones se han interesado para presentar ofertas antes del 9 de diciembre, fecha en que se adjudicará al mejor postor.

La subasta de lotes de propiedades del mayor clan de narcos gallegos continuará el día 13 y concluirá el día 19 de octubre con la licitación de varias fincas, pisos, apartamentos a pie de playa y garajes.

Por otra parte, la Fundación Galega contra o Narcotráfico ha decidido solicitar la creación de una agencia que se encargue de gestionar y administrar los bienes intervenidos a los narcotraficantes para evitar su deterioro, que, en ocasiones, los convierte en inservibles, según su gerente, Fernando Alonso. "Los barcos se hunden en los puertos y las naves terminan totalmente inservibles, calcinadas en ocasiones, al ser utilizadas por indigentes", dice.

Alonso destacó que "esta vez los Charlín no se han podido burlar de la sociedad como hicieron en la anterior, en la que recuperaron parte de sus bienes subastados, algunos a través de una menor de edad, la nieta del patriarca".

Sobre la petición de Manuel Charlín, el patriarca del clan, de que se le permita utilizar el chalet de Cálago (Vilanova) mientras vivan él y su esposa, Alonso recordó que "recientemente le fueron intervenidos bienes por 12 millones de euros y cuentas en las que tienen tres millones, y seguro que les queda aún bastante dinero. Que individuos que vulneran la Ley pidan ahora una excepción no deja de ser grotesco".